Una vez más, Gran Bretaña se prepara para la cuarta boda real en menos de dos años. La reina Isabel ll verá casarse a otra de sus nietas, Beatriz de York, la hija mayor del príncipe Andrés y Sarah Ferguson.
Esta boda es muy esperada por dos cosas, la primera porque Beatriz de York será la primer princesa en convertirse en madrastra, pues Edoardo Mapelli ya tiene un hijo de una unión anterior; y la segunda porque el nombre de Sarah Ferguson -mamá de la novia- aparecerá en el certificado de matrimonio.
Hasta ahora, la iglesia católica anglicana solo permitía que fueran escritos en las actas de matrimonio los nombres y ocupaciones de los padres de los novios, algo que se ejercía en el Reino Unido desde 1837, sin embargo; a principios de 2019 se permite que los contribuyentes puedan incluir a sus madres en los libros de registro.
Y es por eso que Sarah Ferguson hará historia, además de que últimamente el protagonismo de Sarah en la familia real ha crecido tras su divorcio con el duque de York, pues además de que ya vacaciona con la reina Isabel II en Balmoral y ha sido invitada a la boda del príncipe Harry y a la de Lady Gabriella, también decidió que no queria la presencia de Camilla Parker -examante y ahora esposa del príncipe Carlos- en la boda de su hija Eugenia de York.
Con el anuncio sobre la boda de Beatriz de York, Sarah Ferguson se mostró encantada por el compromiso y compartió en su cuenta de Instagram un álbum de los novios: "Sé lo que siente una madre, estoy muy orgullosa de esta noticia sensacional. Andrés y yo somos las personas más afortunadas que han tenido dos grandes yernos", escribió Sarah. Te puede interesar: Beatriz de York vuelve a desafiar a la reina Isabel ll: se quiere casar en Italia