Horas antes de que la princesa Diana muriera en un bajo puente de Francia debido a un accidente automovilístico, ella y su entonces novio Dodi Al Fayed se habían hospedado en el hotel Ritz, propiedad del papá de Dodi. Ahí, mientras la exesposa del príncipe Carlos descansaba en una mastersuite, su novio fue a una joyería para comprar el diamante más grande para Lady Di.
Sin embargo, cuando se dio cuenta que el interior del hotel estaba lleno de paparazzi, Dodi Al Fayed cambió sus planes.
En lugar de cenar en el restaurante L'Espadon en el hotel Ritz, la princesa Diana y su novio Dodi Al Fayed decidieron comer en su suite con la intención de evadir a las decenas de paparazzi que los espiaban por todos lados. Esa noche, Lady Di ordenó lenguado de dover, tempura de verduras y una tortilla de champiñones y espárragos, informó Mirror.
El 31 de agosto, Lady Di y Dodi Al Fayed salieron del hotel a las 12:20 de la madrugada y cinco minutos después, el auto que los conducía, un Mercedes Benz en color negro, se había estrellado contra un pilar en un túnel. Cuando el príncipe Carlos se enteró, quiso volar a París en su avión privado para recoger el cuerpo de la princesa Diana y llevarlo a Inglaterra, pero la reina Isabel II se lo prohibió.
El príncipe Carlos insistió, de acuerdo con Mirror, y como nunca antes había luchado por Diana, esta vez se salió con la suya y tomó el vuelo para llevar a Diana de regreso a su país.