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Es ampliamente conocido que la reina Isabel II tiene prohibido por ley, pronunciarse o dar su opinión de manera pública ante cualquier asunto político interno o externo de su país, algo, que la monarca ha llevado a cabo de manera excepcional desde que asumió el trono hace 70 años.
Sin embargo, con el reciente conflicto bélico que se procude entre Rusia y Ucrania en Europa del este, se recordó el momento en el que la reina Isabel II rompió todo el protocolo real y la constitución, debido a su enojo por un desplante que le hizo Vladímir Putin durante una visita de Estado que el presidente de la Federación de Rusia realizó al Reino Unido hace casi dos décadas.
(Príncipe Felipe, Lyudmila, Vladímir Putin y la reina Isabel II / Getty Images / Getty Images)
Lo anterior ocurrió en junio de 2003, cuando el presidente ruso hizo esperar 15 minutos a la reina Isabel II para uno de sus encuentros, algo que fue mal visto en la cultura inglesa en la que la puntualidad es una de sus principales virtudes y, especialmente, que haya dejado esperando a la monarca, quien tuvo que hacer gala de todo lo aprendido en términos de educación, buenos modales y diplomacia para continuar con los plantes establecidos.
Aunque los reportes de aquel momento hicieron evidente la molestia de la reina Isabel II, también especificaron que mostró total profesionalismo durante el encuentro con Putin, sin tomar en cuenta que el destino le tenía preparada una oportunidad que la monarca supo aprovechar.
(Príncipe Felipe, la reina Isabel II, Vladímir Putin y Lyudmila / Getty Images)
Según lo que se relató, mientras transcurría el encuentro, uno de los perros de David Blunkett, secretario de Estado del Ministerio del Interior del Reino Unido en aquel momento con Tony Blair como primer ministro, le comenzó a ladrar a Vladímir Putin, un episodio que volvió más tenso el encuentro.
Como era de esperarse, el funcionario se disculpó con la reina: “Perdón, Majestad, por los ladridos del perro”, dijo David. No obstante, ni él ni nadie esperaba la respuesta de la reina Isabell II: “Los perros tiene instintos interesantes, ¿no es así?”, dejando entrever su molestia con el mandatario ruso.
(Visita oficial de Vladimír Putin al Reino Unido en 2003 / Getty Images)
Ahora, en medio de la guerra que se está llevando a cabo en territorio ucraniano con la invasión de Rusia a Ucrania, la familia real del Reino Unido ha sorprendido con sus muestras públicas de solidaridad con los ucranianos, haciendo evidente la mala relación que ya se venía gestando entre los dos jefes de Estado.