La mañana del 8 de septiembre de 2022, el mundo despertó con una preocupante noticia, la salud de la reina Isabel II no se encontraba en buenas condiciones y los reportes médicos que se filtraban a la prensa no resultaban del todo alentadores.
La monarca vivió sus últimos días en el castillo de Balmoral, su residencia de verano, donde finalmente tuvo que quedarse después de las vacaciones por los problemas de movilidad que ya experimentaba a sus 96 años.
Además de conmocionar a millones de personas alrededor del mundo, el fallecimiento de Isabel II representó un duro golpe para la estabilidad de la familia real británica, esa que la monarca siempre intentó preservar pese a todos los pronósticos.
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Ahora, en el marco de su segundo aniversario luctuoso, repasamos los cambios más importantes que ha enfrentado su familia. Desde el ascenso del rey Carlos III al trono y el papel fundamental de la reina Camila hasta los diagnósticos de cáncer del monarca y Kate Middleton.
Los cambios más importantes en la familia real tras la muerte de Isabel II
Por supuesto, uno de los acontecimiento más importantes en la familia real británica después de la muerte de Isabel II es el ascenso de Carlos III al trono, un suceso que tuvo que ocurrir sin importar su corazón roto y el luto de todos los Windsor.
Visiblemente afectado, Carlos III se convirtió en monarca de Reino Unido y por lo tanto los papeles en la familia real cambiaron prontamente, dando más protagonismo al príncipe William, Kate Middleton e incluso a Camila Parker Bowles, ahora reina consorte.
Aunque el primer año transcurrió con normalidad, prácticamente como un proceso de adaptación a sus nuevas funciones, los primeros meses del 2024 no fueron positivos para la familia real debido a dos crisis de salud en sus integrantes más importantes, el rey Carlos III y Kate Middleton.
El monarca, de 75 años, ingresó al hospital para someterse a una cirugía de agrandamiento de próstata. No obstante, los primeros días de febrero, Carlos III anunció que se sometería a un tratamiento tras ser diagnosticado con cáncer. Pese a que no ha compartido detalles específicos sobre su enfermedad, nuevos reportes indican que la salud del monarca por momentos es más frágil.
Por si dicha noticia no hubiera resultado del todo impactante para los simpatizantes de la familia real, el mundo fue sorprendido en marzo cuando Kate Middleton, tras un prolongado tiempo de ausencia en el que se sometió a una cirugía abdominal, reapareció en un video para anunciar que se sometería a quimioterapias preventivas luego de también ser diagnosticada con cáncer.
Dicha noticia se ha convertido en uno de los momentos más trascendentales desde la muerte de la reina Isabel II por el inmenso cariño y aprobación que la esposa del príncipe William tiene a nivel mundial. Con una actitud reservada desde entonces, la princesa de Gales solamente ha aparecido en pocos eventos públicos, entre ellos el desfile de Trooping the Colour y la final de Wimbledon.
Debido a todo lo anterior, el príncipe William, la reina consorte Camila y la princesa Ana, hermana de Carlos III, han tenido que convertirse en los principales protagonistas de la monarquía británica.
En cuanto al príncipe Harry, quien desde 2020 radica en Estados Unidos junto a Meghan Markle y sus hijos, ha sorprendido al público con su libro de memorias y su nula relación con William, su hermano. Aunque en las últimas semanas han surgido reportes que indican su interés por arreglar las cosas y mantenerse cerca de los Windsor, el regreso del príncipe Harry a Reino Unido podría no transcurrir de la mejor forma.
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