Han pasado casi cinco meses desde que la princesa Mako de Japón y su esposo Kei Kumoro arribaron a Nueva York para comenzar una vida juntos luego de contraer matrimonio el 26 de octubre de 2021 en una discreta ceremonia que se realizó en Tokio.
Mako es la hija mayor del príncipe heredero Fumihito –el primero en la línea de sucesión al Trono del Crisantemo- y su esposa Kiko. Ahora llamada oficialmente Mako Komuro, también sobrina del actual emperador Naruhito, renunció a todos sus títulos para casarse con un plebeyo y mudarse con él a Estados Unidos.
(Kei Komuro y Mako de Japón / EFE)
Aunque parte de la estrategia de la pareja era bajar el perfil completamente, ahora, un informe publicado por el periódico “Japan Times”, reveló que la exprincesa Mako de Japón es voluntaria no remunerada en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, uno de los más conocidos en el mundo.
Según los datos que se dieron a conocer, Mako que tiene 30 años de edad está trabajando en la colección de arte asiático del museo y específicamente en el montaje de una exposición inspirada en la vida de un monje del siglo XIII que introdujo el budismo en Japón.
(Familia real de Japón / AFP)
Mako estudió Arte y Herencia Cultural en la Universidad Cristiana Internacional de Tokio, lugar donde conoció a su ahora esposo. También estudió Historia del Arte en la Universidad de Edimburgo en Escocia y cursó la maestría en Estudios de Museos y Galerías de Arte en la Universidad de Leicester en Inglaterra. Antes de casarse trabajó como investigadora especial en el Museo de la Universidad de Tokio.
“Ella está calificada y probablemente maneje piezas de la colección. En general, es un trabajo que requiere mucha preparación y muchas veces significa pasar mucho tiempo en la biblioteca”, dijo a People un excurador del Met.
(Mako de Japón y Kei Komuro / AP)
Actualmente la pareja vive en un departamento rentado de una sola habitación en Hell’s Kitchen, el cual, les es alquilado por 4 mil 300 dólares mensuales aproximadamente según la página de internet del edificio de lujo.
Se sabe que Mako renunció al pago de 1.4 millones de dólares, es decir, 28 millones de pesos mexicanos, al que tenía derecho por dejar de formar parte de la familia imperial y casarse con un plebeyo, siendo la primera mujer en la familia en negarse a recibir dicho monto desde la Segunda Guerra Mundial.