Realeza| 10/03/2021 |10:06 |Brando Alcauter | Actualizada
10/03/2021 10:17

Piers Morgan renunció al programa “Good Morining Britain” ayer por la tarde luego de que en la mañana se enfrascara en una discusión personal con su compañero, el metereólogo Alex Beresford, quien lo confrontó por las fuertes declaraciones que realizó un día antes acerca de la entrevista que Meghan Markle le otorgó a Oprah Winfrey y que se transmitió en horario estelar de Estados Unidos el domingo 7 de marzo a través de la CBS.

“Luego de mantener conversaciones con ITV, Morgan ha decidido que es el momento de dejar Good Morning Britain. ITV ha aceptado la decisión y no tiene nada más que agregar”, fue lo que se expresó en el comunicado luego de que la cadena de televisión recibiera más de 40 mil quejas por el comportamiento del presentador durante las emisiones de un día antes y la de ese día.

Este miércoles, Morgan utilizó su cuenta de Twitter, donde tiene más de 7 millones de seguidores, para volver a criticar a la duquesa de Sussex. “El lunes dije que no que le creía a Meghan Markle en su entrevista con Oprah. He tenido tiempo de reflexionar sobre esta opinión y todavía no lo creo. Si usted lo creyó, está bien”, escribió el presentador de 55 años, y continuó, “La libertad de expresión es una colina en la que estoy feliz de morir. Gracias por todo el amor y el odio. Me voy a dedicar más tiempo a mis opiniones”, remató su mensaje Morgan.

No obstante, el periodista decidió acompañar esta publicación con una imagen en la que se aprecia al exprimer ministro del Reino Unido, Winston Churchill, así como una de sus míticas frases: “La idea de algunas personas sobre la libertad de expresión es que son libres de decir lo que quieran, pero si alguien responde algo, es un escándalo”. Leer también: 

Uno de los varios cuestionamientos más duros que realizó Morgan en su intervención de lunes fue que él no creía que Meghan Markle tuviera pensamientos suicidas como lo expresó en la entrevista. Algo que le fue refutado por su compañero, diciendo que la gran cantidad de prensa negativa que los duques han recibido desde que se anunció su compromiso, ha dañado claramente la salud mental de Meghan y el príncipe Harry. Leer también: 

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