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Este miércoles, la duquesa de Susssex, Meghan Markle, afirmó que es el centro de una campaña de desprestigio por parte de la Casa Real del Reino Unido, luego de que el periódico británico "The Times" publicara una denuncia de un empleado de alto rango del palacio de Kensington en contra de la esposa del príncipe Harry por intimidación en el tiempo en el que ella y su esposo vivieron en este lugar antes de mudarse Frogmore Cottage, una casa histórica catalogada de Grado II en Frogmore Estate, parte de Home Park en Windsor.
“La duquesa está entristecida por este último ataque a su persona, particularmente como alguien que ha sido objeto de acoso y está profundamente comprometida con apoyar a aquellos que han experimentado dolor y trauma. Ella está decidida a continuar su trabajo construyendo compasión en todo el mundo y seguirá esforzándose por dar un ejemplo de hacer lo que es correcto y hacer lo que es bueno”, dijo un portavoz de la duquesa este miércoles.
Según "The Times", la denuncia contra Markle fue hecha por Jason Knauf en octubre de 2018 que en ese momento se desempeñaba como secretario de comunicación de los duques de Sussex. “Expulsó a dos asistentes personales de la casa y estaba socavando la confianza de un tercer miembro del personal”, fue parte de lo que Jason denunció. El periódico apunta que Knauf envió un correo electrónico a Simon Case, secretario privado del duque Guillermo de Cambridge, hermano mayor del príncipe Harry y quien actualmente tiene el cargo de secretario de gabinete del primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson.
En ese correo electrónico, Jason Knauf le informó a Case que le preocupaba que no se hubieran tomando cartas en el asunto y que no se hubiera hecho nada para proteger al personal del palacio en el futuro: “estoy muy preocupado de que la duquesa haya podido intimidar a dos asistentes policiales fuera de la casa el año pasado. […] La duquesa parece decidida a tener siempre a alguien en la mira. Ella está intimidando a y buscando socavar su confianza. Hemos recibido informe tras informe de personas que han sido testigos de un comportamiento inaceptable”, dice el correo que citó The Times. Según lo que se sabe, Simon Case lo remitió con Samantha Carruthers, jefa de recursos humanos de Clarence House.
Otro de los puntos relevantes que publicó el periódico inglés, es que Meghan Markle le pidió a su equipo de prensa del palacio que afirmara que los pendientes que fueron un regalo de bodas del príncipe saudí Mahamed bin Salman en una cena en Fiji en 2018, eran prestados, ya que tiempo después, este fuera acusado por la Estados Unidos de asesinar al disidente Jamal Khashoggi. Leer también: Las fuertes revelaciones del príncipe Harry en entrevista con James Corden
Para Meghan no es coincidencia de que esta información se haya revelado a días de que ella y su esposo, sean los protagonistas de una entrevista personal que tuvieron con la famosa presentadora Oprah Winfrey, la cual se trasmitirá por la CBS el domingo 7 de marzo, y en la que hablaron de su experiencia personal con la Corona. Leer también: Harry y Meghan de Sussex: Adelanto de su entrevista con Oprah