Luego de varios meses de la división de las casas reales de Cambridge y Sussex, mucho se ha especulado sobre el distanciamiento entre el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle con el príncipe William y Kate Middleton, sin embargo, aunque ha trascendido que entre las duquesas hay cierta competencia, lo real es que la exactriz sabe que su concuña será la futura reina pero los problemas se asoman cuando ambas tratan de lidiar con la personalidad de la otra.
De acuerdo con la revista People, Meghan Markle, a diferencia de Kate Middleton, se volvió aparte de la familia real cuando ella ya tenía una personalidad y un carácter formado, algo con lo que se ha enfrentado desde que se unió en matrimonio con el príncipe Harry, ya que en más de una ocasión sus declaraciones con la prensa la han puesto en aprietos.
Caso contrario con Kate, esposa del príncipe William, quien conoció al hijo mayor de Lady Di cuando ella era estudiante de universidad, pues ha tenido más tiempo para pulir su rol de futura reina.
“Meghan es muy consciente de que Kate será la reina, sus roles son muy claros. Sin embargo, también hay pocos puntos en común. Meghan no encaja en el molde, mientras Kate fue preparada para esto", dijo la fuente a People.
El verdadero desafío entre las dos duquesas llega cuando están frente a frente, pues ambas son muy distintas en cuanto a personalidad y forma de ser. Se dice que Meghan y Kate no comparten el mismo vínculo familiar, es decir, ni siqiuera se eligirían para ser amigas.
"Eso ha sido un desafío para los dos. Meghan tiene su vida, Kate tiene la suya”, aseguró la fuente.
No obstante, las duquesas entienden muy bien que parte de su trabajo como miembros de la realeza es ver por el bienestar y la estabilidad de la casa real británica, por ello, sus elecciones y decisiones siempre son en pro de los intereses del palacio de Buckingham.
"Todavía se trata de cuidarlo y poner a la familia primero", dijo la fuente.
El testimonio consultado por el medio también confesó que en tanto Meghan Markle y el príncipe Harry tratan de formar sus propias reglas, como Kate y William se apegan a los protocolos ya establecidos.
"William y Kate siguen la línea, tal vez porque tienen que hacerlo, pero Harry y Meghan están diciendo que no".