Desde su llegada al trono, el rey Carlos III analiza todas las opciones respecto a su hijo menor, el príncipe Harry, y su esposa Meghan Markle, quienes han señalado fuertemente a la realeza en más de una ocasión.
Con el reciente estreno de "Harry & Meghan", docuserie de Netflix en la que los duques de Sussex cuentan su historia, expertos reales y autoridades británicas sugieran que deberían ser despojados de sus títulos reales.
El argumento principal es que la pareja se está aprovechando de la monarquía, "destrozando su familia y monetizando su miseria", algo que sin duda pone en jaque a la familia real.
Pero, ¿qué pasaría si el rey Carlos III decide retirar el título a Meghan Markle?
Si el monarca británico decidiera despojar de sus títulos a Harry y Meghan para poner punto final a sus ataques, la exactriz británica se convertiría en una Princesa, pero no una cualquiera, pues el protocolo real indica que al no tener título, tendría que ser conocida como 'princesa Enrique' y no por su nombre de pila, ya que la tradición indica que solamente las princesas nacidas en la familia real pueden hacerlo.
Pero, aunque la mayoría de británicos parecen estar de acuerdo en despojarlos, el rey Carlos III podría rechazar esa idea y permitir que Harry y Meghan conserven los títulos de duques de Sussex, los cuales les fueron otorgados por la difunta Isabel II en su boda en 2018.
De acuerdo con "Page Six" una fuente cercana aseguró: "Quitarles el título no es algo que el Rey probablemente consideraría, principalmente porque sería demasiado mezquino y punitivo".
De la misma forma, aunque la decisión de Carlos III quedaría respaldada por autoridades británicas, enviaría un mensaje erróneo a los simpatizantes de los duques de Sussex, quienes les darían la razón.
La misma fuente que platicó con "Page Six" agregó: "Llevaría a los Sussex a afirmar que fue una acción de represalia y una prueba de que nunca fueron queridos en la familia real".
Este jueves 15 de diciembre se estrenan los últimos capítulos de "Harry & Meghan", los cuales prometen ser incendiarios contra la institución y el propio príncipe William.