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Al igual que la princesa Marie, el fallecido Enrique de Laborde mostró su inconformidad hacía las decisiones de la reina Margarita II en una cena de Año Nuevo. Después de que la soberana decidiera que gran parte de sus nietos ya no llevarían el título de 'príncipes' a partir del 1 de enero de 2023, la esposa del príncipe Joaquin estuvo ausente durante el banquete de fin de año.
Desde el primer día de 2023, los hijos de Marie y Joaquin de Dinamarca, se han tenido que conformar con el titulo de 'condes de Monpezat'; el mismo que llevó su abuelo durante su matrimonio con la reina, y por el cual, la monarca sufrió desplantes en público y en privado de parte de su marido, quien nunca aceptó ser príncipe consorte.
(Marie de Dinamarca junto al príncipe Joaquin / AFP )
Los desplantes de Enrique Laborde a la reina
Enrique Laborde de Monpezat, esposo de la reina Margarita II desde 1967, hasta su fallecimiento en 2018, es el eterno príncipe consorte que siempre quiso ser llamado rey por la realeza europea y se negó a estar detrás de su propio hijo, el príncipe Federico.
La primera vez que el conde sintió una pequeña esperanza de conseguir el título que tanto anhelaba, y no existe en Dinamarca, sucedió en la década de 1990, cuando Margarita no pudo asistir a una gira por motivo de enfermedad, y en su lugar Enrique estuvo presente. Cuando su trabajo recibió grandes elogios por parte de la prensa, el príncipe sintió que dejaría de ser "la sombra o el segundo', como el mismo se llamaba.
(Enrique de Dinamarca, fallecido esposo de la reina Margarita II / Archivo El Universal)
Su título no cambió después de su trabajo, pero nuevamente, creyó que tendría una segunda oportunidad en la cena de Año Nuevo de 2002. Para sorpresa de Enrique, en esta ocasión no sería él quien ocuparía el lugar de su esposa, si no su hijo mayor, el príncipe Federico. Ante la decisión de Margarita, el conde decidió no estar presente en el banquete y se refugió en el castillo francés de Caïx.
(Reina Margarita II junto a su hijo, el príncipe heredero de quien siempre sintió celos su padre, Enrique Laborde / EFE)
Francia no fue su único refugio, la prensa también juego un papel importante, ya que el conde Enrique dio distintas declaraciones a los medios, tal y como lo ha hecho la princesa Marie hoy en día. "Me siento marginado desde hace 30 años, subestimado y rechazado. No he sido respetado ni reconocido por lo que hago", afirmó el conde a la prensa.
A pesar de que la situación logró arreglarse entre la realeza y el príncipe, en 2015 decidió renunciar a sus labores y títulos reales, y terminó por mudarse definitivamente a Francia, su país natal. El rechazo que sintió Enrique durante toda su vida se mantiene aún después de su muerte, ya que se negó a ser enterrado en la Catedral de Roskilde, lugar en donde será sepultada la Reina cuando muera y en donde permanece un vacío por voluntad del Príncipe.
El rechazo de la princesa Marie en la cena de fin de año
(El príncipe Félix, la princesa Marie, el príncipe Joachim, la princesa Athena, el príncipe Henrik y el príncipe Nikolai conmemoran el 50 aniversario del reinado de Margarita II. Septiembre de 2022 / AP)
La princesa Marie -Marie Agathe Odile Cavallier, su nombre de plebeya- siguió los pasos de su suegro, el fallecido Enrique, pues no estuvo presente durante la cena de Año de Nuevo para recibir el 2023. De acuerdo con declaraciones oficiales, su asencia se debe a que su hijo, Enrique de Dinamarca, estaba enfermo y Marie se quedó en París para cuidarlo.
Aunque la razón de su ausencia ha sido clara, es problable que la esposa del príncipe Joaquin haya preferido no compartir mesa con Mary Donaldson, esposa del príncipe heredero Federico, además, de su suegra, la reina Margarita II; quien decretó que sus nietos Enrique y Atenea solo ostentarán el título de 'condes de Monpezat'. La decisión de la monarca también incluye a Nicolas y Felix, hijos del primer matrimonio de Joaquín con Alejandra de Frederiksborg.
