Más Información
La familia real británica forma parte de una de las monarquías que más expectativa causan entre el público y la prensa del corazón debido a que es una de las más antiguas en el mundo y que más personajes polémicos tienen entre sus filas, pero también se ha caracterizado por guardar de manera excepcional sus secretos, como el caso del duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel, y su club secreto, formado por personajes famosos de distintos rubros que se reunían para deleitarse con escandalosos excesos.
Desde que se dio a conocer en la serie de Netflix “The Crown”, que a Felipe de Edimburgo le gustaba tomarse un día a la semana para distraerse de sus deberes reales y ‘soltarse de las riendas de la corona’, fuentes reales se han dado a la tarea de confirmar que al duque le gustava divertirse con sus amigos en fiestas en las que había alcohol y sexo sin límite.
Leer también: La verdad sobre la historia de la princesa Alicia, madre del duque de Edimburgo
De acuerdo con The Sun, se dice que fue gracias al barón Narhum que Felipe llegó al salvaje ‘Thursday Club’, en el que también figuraron importantes personajes de la década de los 50 que destacaban en áreas como el arte, la política o incluso de los medios de comunicación, pese a la difícil relación que llevan con la realeza.
"El club era una reunión de bon viveurs que se reunía una vez por semana todos los jueves para almorzar en el restaurante de pescado Wheeler en Soho, aunque la calidad de la comida no era crucial para el disfrute de sus miembros procedimientos, mientras que la cantidad de la bebida definitivamente era impresionante.
"Un suministro interminable de vino, seguido de oporto y brandy, además de los mejores cigarros, decían que el almuerzo continuaba hasta bien entrada la noche con los invitados cada vez más ruidosos y cada vez más juguetones a medida que pasaban las horas", confesó uno de los exmiembros a The Sun.
Algunos de los miembros de este club han hablado abiertamente de su experiencia dentro de este círculo, como en el caso de Miles Kington, quien escribió a profundidad sobre sus reuniones para The Independent en 1996. Algunos otros nombres como el de David Niven, Peter Ustinov o James Robertson Justice también aparecían en la lista de invitados a esta fiesta semanal sin frenos.
"La atmósfera era pícara y traviesa, no es que nos propusiéramos tener un mal comportamiento deliberado, aunque a menudo las cosas se saldrían de control para cuando todos hubieran bajado una botella o dos.
"Pero básicamente éramos un grupo de hombres comiendo y bebiendo que orgullosamente nos dedicamos a 'Absolute Inconsequence”, aseguró la fuente,
El biógrafo real del príncipe Felipe, Philip Eade, describió estas reuniones como "despedidas de soltero" y también se dice que el secretario privado, el teniente Michael Parker, era quien ayudó a conseguir citas con otras mujeres para el duque de Edimburgo en dichas fiestas.
"Cinco años más tarde, después de casarse con la princesa Isabel, Felipe nombró a Michael, nacido en Australia, para que fuera su clan. Parker también actuó, según los rumores, como el" ayudante "de Felipe cuando el príncipe quería ser presentado a una nueva compañía femenina.
La existencia de este polémico y escandaloso club también fue confirmada por el biógrafo de Philip Eade, quien nombró a Kim Philby, Peter Ustinov y David Niven como sus miembros. Algunas de las fotos de 1950, que ocurrieron durante estas reuniones aún siguen dando vuelta en la web, dejando entrever que varios de los rumores que surgieron en esa fecha son ahora confirmados. Cabe señalar que del mismo modo se especuló que el duque de Edimburgo pudo ser infiel con mujeres que asistieron a esta reuniones de caballeros, aunque, claro esto nunca ha podido ser verificado.