En medio del escándalo del divorcio del jeque de Dubai y la princesa Haya de Jordania, la exesposa del gobernante, Randa al-Banna, quien fue expulsada en la década de los 70 de los Emiratos Árabes Unidos, mantuvo el silencio por varios años, pero luego de enterarse de los casos de desaparición de las princesas Latifa y Shamsa, decidió romper el silencio y hablar sobre el caso de su hija Manal, a quien tuvo con el emir Mohammed bin Rashid.
La que fue la primera esposa del jeque Mohammed bin Rashid, Randa al-Banna confesó al diario inglés The Times que su historia de amor con el gobernante de Dubai comenzó cuando ella tenía tan solo 16 años. Se conocieron durante una fiesta en su ciudad natal, Beirut, duró poco el cortejo y pronto se unieron en matrimonio, sin embargo, después de que nació su primera hija, Manal, se enteró de un asunto sobre su esposo que la orilló a pedirle el divorcio.
Tras su separación del gobernante de Dubai, Randa al-Banna fue obligada a regresar a su natal Beirut y separarse de Manal, quien actualmente es una mujer de más de 40 años que ya tiene hijos propios.
“El emir me privó de ver a mi hija y de mi vida como abuela. Me niega la oportunidad de ir y ver a mis nietos”, dijo Randa al-Banna a The Times.
La exesposa del jeque de Dubai detalló que su decisión de separarse del emir fue lo que provocó no ver más a su hija todos estos años: “Es injusto, muy injusto. Todo porque tomé la decisión de irme y ser libre (…) No puedo verla porque soy la que quiso abandonarle. Mi castigo es no poder verla (...) No sé que aspecto tiene ahora”.
La mamá de Manal aseguró que nunca hubo intenciones por parte del emir de cumplir su promesa de dejarle ver a su hija en las fechas importantes: “Me prometió: ‘Te dejaré verla. La verás en Harrods en Navidad. No, mejor en Pascua. No, después del Ramadán’, decía. Y la vida fue pasando. Una vida entera”.
Incluso, señaló que en el año 2000 viajó hasta Dubai para ver a su hija pero cuando llamó a su exmarido, él parecía accesible y le dio una dirección e instrucciones para que pudiera reencontrarse con Manal, pero a su llegada no encontró a su hija por ningún lado, y al otro día tuvo que partir. Desde entonces ha sido vetada de Dubai, aunque cabe señalar que cinco años más tarde intentó regresar para la boda de su hija, pero no tuvo éxito.
Unos días antes de que se llevará a cabo la boda de Manal, fue brutalmente atacada por un hombre que le rompió cuatro vértebras, y al despertar en el hospital, vio a su exmarido al pie de la cama y le dijo “¿Qué es lo que te hice que te hiriera tanto?”, a lo que el emir contestó: “¿Estás loca? Eres de mi familia. Jamás te haría daño”. Una actitud que Randa al-Banna dijo le recuerda a la que tuvo con su desaparecida hija Latifa, después de su frustrada fuga.
“Cuando me enteré de la historia de Latifa, le envié varios mensajes, diciéndole: ‘Eres su padre. No puedes hacerle esto. Ella forma parte de ti’. Pero él jamás me contestó”, dijo Randa al-Banna."Si me deja ver a mi hija, el daño quedará reparado. Lo único que quiero es tenerla en mis brazos una vez más", finalizó Randa al-Banna.