La princesa Martha Luisa de Noruega, de 51 años, nunca ha sido muy tradicional, a pesar de que el sueño de muchas pequeñas es precisamente el de ser una princesa, al parecer, a la hija mayor de los reyes Harald y Sonia de Noruega, hermana del príncipe heredero Haakon Magnus, su posición como royal siempre la ha tenido un poco sin cuidado, prefiriendo dedicarse al mundo espiritual.
La cuarta en la línea al trono noruego, Martha Luisa, quien pidió a su padre hace años que le quitara el título de “su alteza real”, ha emprendido algunos negocios y ha vivido por periodos prolongados fuera de Noruega, en Estados Unidos e Inglaterra.
Sin embargo, lo que más aleja a la princesa de otros miembros de la realeza europea es su interés por lo esotérico. Martha Luisa afirma ser clarividente y poder comunicarse con los ángeles y los animales. Incluso, de acuerdo con el ‘Evening Standard’, en 2007 creó una organización llamada Astarte Education/Soulspring, dedicada a “poner a la gente en contacto con sus ángeles” y también a enseñar a comunicarse con los muertos. Coloquialmente conocida en Noruega como la “escuela de ángeles”, cerró sus puertas en 2018.
La princesa Martha Luisa y Ari Behn. (Foto: AP)
En 2002, Martha Luisa se casó con el escritor noruego Ari Behn. Behn siempre fue considerado como un tanto excéntrico y era conocido por sus frecuentes discusiones con críticos literarios y artistas, incluso llegó a retar al crítico Kjetil Rolness a duelo “con pistolas o espada”.
Su primer libro fue un gran éxito, mismo que no lograron sus posteriores novelas y obras de teatro, entonces se dedicó también a ser colaborador freelance de algunas publicaciones, diseñó vajillas, fue modelo, dirigió documentales y hasta apareció en cine y televisión.
Behn y Martha Luisa tuvieron tres hijas, Maud Angelica, de 19 años; Leah Isadora, de 17, y Emma Tallulah, de 14. Ni Behn ni las hijas de ambos han tenido nunca un título nobiliario.
En 2016, la princesa y el autor se divorciaron y pactaron la custodia compartida de sus hijas. Behn se suicidó el 25 de diciembre de 2019, a la edad de 47 años. Martha Luisa se mostró profundamente afectada por este hecho.
La princesa Martha Luisa y Durek Verrett. (Foto: Instagram)
Antes de este trágico evento, en el mismo año, cuando Martha Luisa ya tenía tres años divorciada y estaba en Los Ángeles en la presentación de su libro ‘Born sensitive’, una amiga le presentó al chamán californiano Durek Verrett, convencida de que habría química entre ambos. En su primera cita compartieron una comida vegana macrobiótica y el resto, como se dice, es historia. Ambos sintieron una conexión inmediata y empezaron a pasar mucho tiempo juntos.
Dado que los dos dedican su vida al mundo esotérico y espiritual, su química instantánea no resulta extraña. De acuerdo con Verrett, de 48 años y quien es abiertamente bisexual, Martha Luisa y él ya estuvieron unidos en otras vidas, incluida una en Egipto donde él era faraón y ella su reina.
Verrett asegura que su mamá, Veruschka, quien, de acuerdo con él, es su “portal de luz”, predijo su romance. En un post de Instagram, Verrett escribió: “Cuando era un adolescente, mi madre me dijo que algún día, alguien de Noruega me encontraría y traería mucho gozo a mi corazón. Le pregunté ‘¿Quién, madre?’ y contestó ‘una princesa’, yo le respondí ‘Sí claro, madre, una princesa, eres muy graciosa’. Y tenía razón, mi alma gemela me encontró”.
Por su parte, Martha Luisa escribió en su Instagram: “Cuando conoces a tu llama gemela, lo sabes. Tengo la suerte de haber encontrado a la mía” y añade “te amo, desde esta eternidad a la siguiente”.
Verrett asegura saber que poseía poderes chamánicos y curativos desde que tenía 5 años, pero que no empezó su entrenamiento sino hasta los 11. De acuerdo con el Daily Mail, se describe como “un sanador de sexta generación”. Aunque nació en Estados Unidos, su padre, David, era un ingeniero haitiano-africano y su madre es de ascendencia indio-noruega.
Ha contado entre sus clientes a celebridades como Selma Blair, Nina Dobrev, Chris Pine o Rosario Dawson, por lo que se le conoce como “chamán de las estrellas”. Dave Asprey, el creador del ‘café a prueba de balas’ lo describe como el “Michael Jordan de los chamanes”, según el ES.
Gwyneth Paltrow lo tiene listado entre los autores que colaboran en su sitio de wellness, Goop. En su página de autor, dice: “Funciona como mediador o ‘puente’ entre el plano físico y el espiritual, aplica una sabiduría espiritual muy antigua que combina con muchos años de estudio y práctica para ayudar a traer éxito, felicidad y sanación a las vidas de las personas”.
La relación no ha estado exenta de controversia, algunas voces han criticado a Martha Luisa, acusándola de utilizar su posición como princesa para promover el trabajo de Verrett, otros cuestionan las prácticas de Verrett, acusándolo de ser un charlatán. Sin embargo, la pareja se mantiene feliz y unida y, en algún momento de 2020 que no se desveló públicamente, se comprometieron.
Antes, en 2019, anunciaron que crearon un emprendimiento conjunto llamado ‘La princesa y el chamán’ –de ahí las críticas a Martha Luisa—a través del cual ofrecen talleres, retiros y otros eventos relacionados con el desarrollo espiritual. También escribieron un libro en conjunto llamado “Shaman Durek: Spirit Hacking”, en 2020.
Entre la comunidad esotérica su trabajo ha sido bien recibido y tienen un buen número seguidores en redes sociales.
A pesar de las críticas, la familia real de Noruega --que siempre se ha distinguido por ser mucho menos rígida que otras casas reales—inicialmente recibió la relación con beneplácito. Cuando se anunció el compromiso de Martha Luisa y Durek, la casa real emitió un comunicado en el que se leía: “Su majestad el rey y su majestad la reina envían sus más cálidas felicitaciones y les desean lo mejor para el futuro”.
Sin embargo, en 2022, la princesa anunció que “debido a muchos cuestionamientos relacionados conmigo y con mi prometido” renunciaría a sus deberes reales. Añadió que esta decisión fue tomada en conjunto con el rey y la reina “buscando la paz”.
Esta decisión fue resultado, según se asegura en diversos medios, de que Shaman Durek dice en su libro “Spirit Hacking” que el cáncer es una elección y también por la venta en su sitio de unos medallones llamados “optimizadores de espíritu” los cuales, supuestamente, lo ayudaron a sobreponerse al Covid.
La prensa noruega cuestionó fuertemente la posición del chamán y de la princesa, lo que la obligó a renunciar a su rol real para dedicarse más al proyecto común de la pareja.