Ayer por la noche, la British Broadcasting Corporation, el servicio público de radio y televisión del Reino Unido, mejor conocido en todo el mundo como la BBC, transmitió la primera parte del documental “Los príncipes y la prensa”, que se tituló “La nueva generación” y, en la que se analiza la relación de los príncipes Guillermo y Harry con los medios de comunicación entre 2012 y 2018, la salida de los duques de Sussex de la familia real y la supuesta filtración de información negativa contra Meghan Markle desde las casas reales inglesas.
En un hecho sin precedentes, el palacio de Buckingham, que representa a la reina Isabel II; Clarence House, que representa al príncipe Carlos y su esposa Camila de Cornualles y, el palacio de Kensington, que representa al príncipe Guillermo y su esposa Kate Middleton, lanzaron un comunicado que la misma BBC reprodujo después de la emisión del documental.
(La BBC transmitió el lunes 22 de noviembre el documental 'Los príncipes y la prensa' / AP)
“Una prensa libre, responsable y abierta es de vital importancia para una democracia sana. Sin embargo, demasiado a menudo hay declaraciones infundadas y exageradas de fuentes desconocidas que se presentan como hechos y es irritante que cualquiera, incluida la BBC, les de credibilidad”, apunta el comunicado.
En el documental que causó escozor al interior de la familia real británica, la abogada Jenny Afia de la firma legal Schillings, quien ha representado en varias ocasiones a Meghan Markle, negó las acusaciones hechas contra la duquesa de Sussex en el periódico “The Times” por parte de algunos trabajadores. “Estas historias son falsas. Lo de que nadie puede trabajar con la duquesa de Sussex, que es muy complicada y exigente como jefa y que muchos abandonaron, no es cierto”.
(Parte de la familia real británica en la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton en 2011 / EFE)
Omid Scobie, uno de los dos autores de la biografía no autorizada de los duques de Sussex, “Finding Freedom”, también participó en este documental y fue muy claro al asegurar que integrantes de las casas reales fueron los que dieron a conocer historias negativas de la pareja. “Hubo algunas personas que sintieron que ella (Meghan Markle) necesitaba que la pusieran en su lugar. Y creo que filtrar una historia negativa es un castigo”, dijo.
Por su parte, el detective privado Gavin Burrows, confesó que fue contratado para investigar y seguir los pasos de Chelsy Davy, la que fuera novia del príncipe Harry allá por 2004. Según él, el objetivo principal era que el joven se estaba convirtiendo en ‘la nueva Diana’ por la atención mediática. “Yo era básicamente parte del grupo de personas que le robaron sus años normales de adolescencia”, explicó.
(Parte de la familia real británica en el bautizo de Archie, hijo de los duques de Sussex en 2019 / EFE)
El documental que fue presentado por Amol Rajan, un periodista republicano que ha descrito a la monarquía como “absurda”, causó tanto malestar en las casas reales inglesas que todas amenazaron con no volver a participar en proyectos futuros con la BBC, después de que no se les permitiera ver por adelantado el contenido del mismo. Se sabe que la segunda parte de este trabajo se transmitirá el próximo 9 de diciembre y girará en torno a la pelea que hay entre el príncipe Harry y el príncipe Guillermo.