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Aunque el príncipe Harry y Meghan Markle llevan varias semanas sin aparecer juntos en público, sus nombres volvieron a acaparar la atención luego de que medios británicos dieran a conocer que la pareja está considerando mudar su residencia dentro de Estados Unidos, ya que de la mansión que compraron en Montecito, California, todo parece indicar que quieren cambiarla por una casa rentada en Nueva York.
Según la información que se difundió, el principal objetivo de los duques de Sussex es vivir cerca de la sede de las Organización de las Naciones Unidas, es decir, en Midtown East en Manhattan, ya que actualmente Meghan Markle tiene la intención de participar activamente en la ONU como su amiga Amal Clooney, quien fue asesora del exsecretario general Kofi Annan, quien ocupó este cargo desde 1997 hasta 2006.
(Meghan Markle y el príncipe Harry / AFP)
De hecho, los rumores encontraron fuerza luego de que, en septiembre de 2021, la pareja reapareció públicamente por primera vez después de tener a su segunda hija, Lilibet Diana, en una reunión con la vicesecretaria general Amina Mohammed con la que se fotografiaron con el escudo de la ONU a sus espaldas.
Los duques y la exministra del Medio Ambiente de Nigeria conversaron acerca de la acción climática, el empoderamiento económico de las mujeres, del bienestar mental, de la participación de los jóvenes y la equidad en las vacunas.
(Príncipe Harry y Meghan Markle / Getty Images)
Cabe recordar que el príncipe Harry y Meghan Markle estaban en esta ciudad estadounidense para asistir al concierto benéfico Global Citizen Live, el cual se organizó en Central Park con el objetivo de pedirles a los líderes mundiales que adoptaran una política de equidad en la distribución de las vacunas contra el Covid-19.
Por si no fuera poco, el hijo del príncipe Carlos, el heredero al trono del Reino Unido, y su esposa, también se reunieron con Linda Thomas-Greenfield, embajadora de Estados Unidos en las Naciones Unidas con la que platicaron de la justicia racial y con concientización de la salud mental.
En caso de que la información se confirme, Harry y Mengan dejaran su mansión de más de 14 millones de dólares y de casi tres hectáreas, a la que llegaron luego de dejar sus puestos como integrantes senior de la familia real británica y abandonar Londres.