Más Información
Las cosas en la vida de Ernesto de Hannover, aún esposo de Carolina de Mónaco, siguen dando de qué hablar. El soberano y jefe de la Casa de Hannover ya está fuera de la lujosa clínica de desintoxicación a la que recurrió para desintoxicar su cuerpo del abuso del alcohol, pero aunque se sabe que quiere rehacer su vida sentimental al lado de la escultora Claudia Stilianopoulos -lo que supondría que los títulos nobiliarios de Carolina están en juego-, ahora fue captado en franca pelea con su hijo Christian en plena luz del día.
(Ernesto de Hannover tiene 67 años y nació en Hannover, Alemania / EFE)
De acuerdo con el español "Chance", Ernst August Prinz von Hannover Herzog zu Braunschweig und Lüneburg Königlicher Prinz von Großbritannien und Irland vive en Madrid, España, donde intenta retomar su vida pacífica, revivir su vida amorosa y estrechar lazos con su hijo Christian, con su nuera Sassa de Osma y sus nietos Nicolás y Sofía pero, al parecer, el explosivo carácter del soberano lo ha vuelto a poner en evidencia mediática.
Según el medio antes citado, Ernesto de Hannover se reunió con Christian en uno de sus restaurantes madrileños preferidos y juntos degustaron alimentos como ostras y almejas, pero a juzgar por las imágenes que ya circulan en la web, padre e hijo no lograron llegar a un acuerdo y fueron captados manoteando y, especialmente el aún esposo de Carolina, levantando la voz frente a todo el mundo ahí presente.
Leer también: Ernesto de Hannover, internado en una clínica de desintoxicación
Al parecer, el príncipe alemán, calificado como 'enfant terrible', sigue teniendo un carácter poco tolerante. Apenas la semana pasada fue captado discutiendo con la que se supone es su novia, Claudia Stilianopoulos, en Ibiza, donde juntos pasaban unos días de descanso. A pocos meses de haber iniciado su romance, Ernesto y la escultora han tenido su primer zafarrancho en plena calle.
Fue a principios de este año cuando la Corte Regional de Wels, en Austria, exigió a Ernesto de Hannover que debía cumplir 10 meses en la cárcel, recibir psicoterapia, pagar los daños que ocasionó en un altercado con un bat y dejar las bebidas alcohólicas.
Leer también: El futuro de Ernesto de Hannover, en riesgo tras demandar a su hijo