El jueves 19 de mayo, el rey emérito Juan Carlos I volvió a pisar suelo español tras autoexiliarse casi dos años en Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos. Tuvieron que pasar 655 días para que el papá del actual rey de España, Felipe VI, regresara a la madre patria en un viaje que ha sido considerado por el gobierno como de carácter privado.
(Rey Juan Carlos I de España / AFP)
El rey llegó en un avión particular al Aeropuerto Internacional de Vigo-Peinador, ubicado en el municipio de Vigo que pertenece a la provincia de Pontevedra. Juan Carlos I fue recibido por su hija mayor, la infanta Elena, la primera de los tres que procreó de su matrimonio con la reina Sofía de Grecia y Dinamarca.
Uno de los principales motivos del regresó del rey emérito a España desde que dejó el país el 3 de agosto de 2020, es la tan esperada reunión en el Palacio de la Zarzuela con su todavía esposa la reina Sofía y su hijo el rey Felipe VI de España, así como con otros integrantes de la familia real antes de regresar ese mismo día a Abu Dabi.
(Rey Juan Carlos I de España y su nieto Pablo Urdangarin / EFE)
Aunque el regreso del rey ha provocado una polémica al interior de la sociedad española debido a que una parte de ella exige la rendición de cuentas de Juan Carlos I por los negocios que hizo mientras fue jefe de Estado, él y su familia han querido dejar claro el carácter privado de su visita, por lo que, este fin de semana, el rey viajó del club náutico de Sanjenjo, en donde el exmonarca se ha hospedado desde que llegó, hasta la ciudad de Pontevendra, capital de la provincia homónima, para asistir al partido de balonmano que disputaron los equipos del Barca B y el Club Cisne.
(Rey Juan Carlos de España y su nieto Pablo Urdangarin / EFE)
El motivo de que el rey emérito Juan Carlos presenciara dicho partido es que uno de los jugadores del Barca B es su nieto Pablo Urdangarin, el segundo de los cuatro hijos que procreó el matrimonio formado por la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, quienes protagonizaron hace unos meses un escándalo internacional, luego de que se difundieron fotos de él paseando con otra mujer que no era su esposa.
Cabe destacar que tras la difusión de las imágenes, Iñaki y la hija de Juan Carlos I decidieron poner en pausa su matrimonio y lo anunciaron a través de un comunicado que enviaron a los medios de comunicación.
“Muy bien. Todo estupendo. Los nietos muy bien”, fueron las tres frases que Juan Carlos I de España dijo a la prensa, la cual, lo cuestionó tras el encuentro con su nieto. Según las imágenes que se difundieron del partido, se pudo observar que el exmonarca ocupó uno de los asientos del estadio en el que se jugó el partido y examinó el desempeñó de Pablo.
El momento más emotivo fue cuando al finalizar el partido Pablo se acercó a las gradas y saludó con un abrazo y un beso a su abuelo, quien hizo lo mismo y no lo soltó por unos cuantos minutos. De hecho, Juan Carlos I y su nieto intercambiaron algunas palabras y luego Pablo le besó la mano al rey emérito.