Solamente faltan algunos días para que termine el 2024, un año que pasará a la historia dentro de la familia real británica debido a que dos de sus integrantes clave, el rey Carlos III y Kate Middleton, fueron diagnosticados con cáncer.
El primero en anunciarlo fue el monarca británico durante el 6 de febrero mediante un comunicado, el cual reportaba que a sus 76 años debía permanecer alejado de la vida pública durante algunas semanas para atender su respectivo tratamiento.
Semanas más tarde, el 22 de marzo, la princesa de Gales apareció en un video compartido a través de redes sociales para anunciar su propio diagnóstico, marcando un hito en la historia de la familia real británica y estableciendo gran preocupación a nivel mundial.
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Después de ese momento las actualizaciones por parte de ambos fueron escasas, sin embargo, el rey Carlos III fue el primero en retomar su agenda de compromisos con estrictas medidas de control para evitar que su tratamiento resultara afectado.
Aunque la esposa del príncipe William, Kate Middleton, regresó a la vida pública meses más tarde y de forma paulatina, fue el pasado septiembre cuando confirmó que su tratamiento de quimioterapia había concluido, brindando un respiro de calma al entorno de la realeza.
El rey Carlos III seguirá recibiendo tratamiento contra el cáncer en 2025
Pese a que la mejoría de Kate Middleton representa un gran alivio para todos los simpatizantes de la monarquía británica, incluidos la reina Camila y el príncipe William, quienes tuvieron que asumir más compromisos en sus agendas para balancear su ausencia, el rey Carlos III todavía no puede gozar de la misma tranquilidad.
De acuerdo con la cadena Sky News, un reporte desde el Palacio de Buckingham indica que el monarca todavía tendrá que recibir tratamiento contra el cáncer durante 2025, sin embargo, sus médicos parecen convencidos de que su salud mejora.
"Su tratamiento ha ido avanzando en una dirección positiva y como se trata de una enfermedad controlada, el ciclo de tratamiento continuará hasta el nuevo año", reza el mensaje compartido sobre la salud de Carlos III.
En los últimos meses, pese al control médico y restricciones, el hijo de la fallecida reina Isabel II ha podido viajar a Francia, Australia y Samoa. Además también ha podido recibir las visitas del emperador Naruhito de Japón y a Tamim bin Hamad Al Thani, el emir de Qatar.
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