El príncipe William ha pasado por mucha tensión desde que su hermano, Enrique de Sussex, renunció a su rol senior dentro de la familia real y comenzara a criticar públicamente a todos sus parientes.
El peor momento para William, esposo de Kate Middleton, fue en marzo de 2021, cuando Harry y Meghan Markle dieron una entrevista a Oprah Winfrey, con quien lanzaron serias acusaciones contra la casa Windsor.
Quizá los dardos más venenosos fueron cuando Meghan dijo que no recibió atención especializada cuando se sintió deprimida y tuvo pensamientos suicidas, así como cuando acusaron a un miembro de la familia real de racista.
Fue en ese momento cuando el príncipe William cayó enfermo durante una semana y, aseguran, hasta dejó de comer.
"Lo que encuentro bastante sorprendente y lo he escuchado durante mucho tiempo de muchas fuentes diferentes, es que en el período previo a esa entrevista de Oprah, William estaba literalmente enfermo de preocupación", contó Charlotte Griffiths, editora del 'Mail on Sunday'.
."No estaba comiendo y se volvió, no solitario, pero definitivamente se estaba escondiendo. Fue a una residencia real por un período de tiempo para aislarse del mundo. Básicamente, estaba en pedazos".
Por esa razón, Charlotte contó que Kate Middletón levantó la voz para proteger y defender a su esposo a costa de lo que fuera.
"Y eso probablemente la hizo bastante dura a pesar de que tiene esta reputación de ser tímida. Pero cuando se trata de proteger a su esposo, ella intervendrá y lo protegerá a él".
Luego de esas incendiarias declaraciones, la entonces reina Isabel II autorizó la liberación del comunicado oficial del palacio de Buckingham:
"Los temas planteados, particularmente el de la raza, son preocupantes. Si bien algunos recuerdos pueden variar, se toman en serio y la familia los abordará en privado. Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros muy queridos de la familia".