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Una vez más, el príncipe Harry, hijo del rey Carlos III del Reino Unido, está causando tensión en la corona británica, pero en esta ocasión sus palabras han trascendido fronteras y llegaron hasta el grupo de terroristas Al Qaeda, quienes lo amenazaron de muerte por haber revelado que mató a 25 afganos durante su servicio en la milicia.
Luego de narrar en su libro "Spare: En la sombra", publicado el pasado 10 de enero, parte de su infancia y adolescencia como miembro de la familia real; la trágica muerte de su mamá, la princesa Diana; sus primeros encuentros con Meghan Markle, su esposa; y su participación en la guerra de Afganistan, su bienestar se encuentra en riesgo.
(Memorias 'Spare' del príncipe Harry, publicadas en enero de 2023 / AFP)
"Cuando me encontré sumergido en el calor y la confusión del combate, no pensé en esos 25 como personas. Eran piezas de ajedrez quitadas del tablero, las personas malas eliminadas antes de que pudieran matar a las buenas", escribió Harry en sus memorias. De acuerdo con la revista "One Unmah", en su edición número 8, ante dicha confesión Al Qaeda ha pedido a sus terroristas hacer verganza en contra de Enrique de Sussex, a quien se refieren como Al Zanim.
Para los miembros árabes, hacer justicia sería "dar paso a las manos islámicas para que sean ellas las que se tomen su justa retribución, ya que los crímenes no caen por estatuto de limitaciones", dijo Al Qaeda para la publicación de "One Unmah" a la que tuvo acceso "La Razón" de España.
Además, el grupo de terroristas considera que los medios occidentales decidieron ignorar la declaración del propio Príncipe sobre los afganos y centrarse en otras más 'controversiales', incluso sabiendo que se refirió a ellos de manera despectiva y discriminatoria, "como si la sangre de los afganos no tuviera el menor respeto en esta mentalidad arrogante".
Por estas razones, Al Qaeda argumenta que "el sentimiento del hombre inglés racista está por encima de los humanos; los otros son solo peones y piezas de ajedrez que el inglés puede quitar de la faz de la tierra cuando quiera y desea derramamiento de sangre", pues el acto que Harry describió en su libro autobiográfico, "revela la cantidad de condescendencia, discriminación y amor a la criminalidad en los genes de este componente humano".
(AFP)
Aunque hasta ahora el rey Carlos III y su consorte, Camila del Reino Unido, no se han pronunciado sobre el tema; se cree que los duques de Sussex, Harry y Meghan Markle, no asistirán a la coronación oficial, el próximo 6 de mayo, como medida preventiva ante las recientes amenazas hacía el Duque. Sin embargo, lo sucedido no solo los pone en riesgo a ellos, sino también a más casas reales que asistan al acto oficial.
Princesa Amalia, heredera al trono de Países Bajos
(Getty Images)
Al igual que el duque de Sussex, la princesa Amalia, hija del rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos, sufrió amenazas que atentaron contra su vida en septiembre de 2022. De acuerdo con "Daily Mail", la joven heredera al trono holandés era el objetivo de la 'Macro maffia', división de mafía marroqui que habita en los Países Bajos y "se cree que controla aproximadamente un tercio de todo el tráfico de cocaína en Europa".
La situación ocurrió en verano del año pasado, cuando la polícia interceptó las conversación del crimen organizado en donde se menciona el nombre de la princesa Amalia; mas tarde, el diario neerlandés "De Volkskrant" compartió la información y dijo que la Princesa permanecería en su casa debido a que su equipo de seguridad no podía garantizar una vida normal para ella.
Según el medio "Blid", si la organización lograba que Catalina Amalia de Orange fuera su rehén, se garantizaba la liberación de su lider Ridouan Taghi, conocido como 'De Kleine', quien se encuentra detenido en una carcel de máxima seguridad en Vughty, Países Bajos y fue uno de los narcotraficantes más buscados en el mundo.
Antes de que su nombre estuviera en boca de criminales, Amalia de Holanda asistía presencialmente a sus clases en la Universidad de Ámsterdam, en donde estudía Política, Psicología, Derecho y Economía; pero desde entonces, ha tenido que tomar sus clases de forma virtual en el palacio Huis ten Bosch, residencia real. De acuerdo con "De Telegraaf", actualmete se encuentra bajo el cuidado de los servicios secretos.
A pesar de estar protegida, recientemente acudió a un acto público acompañada de sus padres, el rey Guillermo Alejandro y Máxima de los Países Bajos, en las islas Antillas Holandesas, en donde se sincero sobre lo ocurrido y declaró en conferencia de prensa: "Voy a ser muy sincera, todavía lo estoy pasando muy mal. Echo de menos la vida normal, la vida de estudiante. Andar por la calle, poder ir a una tienda".
