Se dice que cuando el príncipe William se casó con Kate Middleton le prometió que no la separaría de su familia. Desde entonces, hemos visto que la duquesa de Cambridge balancea su tiempo entre los Windsor y los Middleton, tanto en su casa de Bucklebury como en el verano, durante las vacaciones familiares en el Caribe, a las que también van Pippa y James Middleton, hermanos de Kate.
Los papás de Kate Middleton, Carole y Michael, solían ser invitados con frecuencia a distintas fiestas y celebraciones de los Windsor, incluso, pasaban los días de descanso junto a ellos en la casa de Balmoral, en escocia del príncipe Carlos, pero de un tiempo para acá se dice que las visitas de los Middleton se han hecho más escasas, pues el mismo papá de William ha pedido que sea de esta forma.
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Foto: Instagram @clarencehouse
De acuerdo con la revista Vanitatis, el príncipe de Gales ha pedido que las invitaciones a los papás de Kate sean menos frecuentes, ya que podría sentirse celoso del tiempo que pasan sus consuegros con sus nietos. Carlos de Gales ha expresado que le gustaría disfrutar más de los hijos de William: George, Charlotte y Louis, pues desea ser parte de la preparación del tierno George al trono y le gustaría enseñarle algunas actividades clásicas de los royal británicos como la caza o la pesca.
También se sabe que en un intento por ser más unido a sus nietos, ha instalado una casa del árbol en una de sus fincas, pero ha permanecido vacía, debido al poco tiempo que puede compartir con sus nietos.
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Y dado que los Middleton se han mostrado como unos sensacionales abuelos, quienes incluso ayudan a su hija a hacerse cargo de los pequeños cuando el matrimonio no puede, como aquella ocasión en la que los duques de Cambridge participaron en una regata benéfica, o cuando Kate se instaló en casa de sus padres tras dar a luz a George, lo que podría tener sensible al príncipe Carlos, quien también perdió cercanía con su nieto Archie Harrison, desde que sus papás decidieron mudarse del otro lado del mundo.
Sin embargo, parece que todo es cuestión una compleja agenda por ambas partes, pues desde que los Sussex abandonaron sus labores reales, el trabajo ha aumentado en especial para el heredero al trono y su esposa Camila Parker, pero también para los duques de Cambridge, quienes antes de la pandemia por Covid-19 no se daban abasto con sus apariciones públicas.
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