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Todas las indiscreciones que el papá de la duquesa de Sussex, Thomas Markle, reveló a Morgan Piers en una entrevista fueron suficiente motivo para que este trabajo periodístico se colara entre los nominados a los próximos premios BAFTA TV que destacan lo mejor de la televisión.
Es decir, bastó con que el papá de Meghan Markle abriera la boca para decir que su hija se aisló desde que ingresó a la familia real, entre otros escándalos de la ahora duquesa, para quedar entre los favoritos de ganar tan prestigioso premio.
Esta nominación al papá de Meghan Markle por un premio BAFTA puso en entredicho la calidad de la premiación, pues se ha comentado que los problemas de la duquesa con su papá no es un tema tan importante como otros de tinte político y económico.
Sin embargo, lo más escandaloso de todo es que hay quienes sospechan quién está detrás de todo esto: los duques de Cambridge.
De acuerdo con Vanitatis, " el futuro heredero es el presidente de BAFTA (British Academy of Film and Television Arts) desde 2010, por lo tanto, es la máxima autoridad y, para muchos, responsable directo de que este 'despropósito' -como algunos lo califican- vuelva a tener su hueco en la actualidad informativa. Algunos teorizan con el control que el duque de Cambridge ejerce sobre la organización, otros le responsabilizan de dar alas a Piers Morgan para que siga "acosando y atacando a Meghan como ha hecho durante todo el embarazo".
Y todo llama más la atención porque la boda de Meghan y Harry es considerado el evento del año y estaba nominado como la mejor producción para televisión pero, de repente, apareció el papá de Meghan con sus polémicas declaraciones a Piers Morgan y todo cambió.
Después de todo, ni la boda real ni la entrevista fueron ganadoras. ¿Será que, en verdad, se trata de un golpe orquestado por el príncipe William?