Tal pareciera que las cosas entre el jeque de Dubai, Mohammed bin Rashid Al-Maktoum y su esposa, la princesa Haya no son del todo favorables, pues ella ha iniciado con los trámites de divorcio en Londres, donde se refugia, pues teme por su vida tras escapar de su marido. Y como era de esperarse, la princesa contrató para su divorcio a una de las abogadas más prestigiadas de Reino Unido, Fiona Shackleton, quien ha llevado casos de divorcios como el del príncipe Carlos con Lady Di y más recientemente el de Paul McCartney con Heather Mills, casos que se caracterizaron por ser tormentosos, largos y multimillonarios.
Príncipe Carlos y Diana de Gales
Sin duda, una de las relaciones más mediáticas y posiblemente de las más tormentosas de la realeza fue la de los príncipes de Gales. La pareja real se casó en julio de 1981 en la catedral de San Pablo en Londres. De este matrimonio nacieron dos hijos: William (1982) y Harry (1984). Todo parecía ir bien hasta que comenzaron los rumores de infidelidad por parte del príncipe Carlos con Camila de Cornualles, además del notable distanciamiento de la pareja.
Fue así como en 1992, los príncipes de Gales comenzaron con sus trámites de divorcio, el cual se consumaría hasta cuatro años después, en agosto de 1996. Para este proceso, ambos contrataron excelentes pero costosos abogados que los ayudarían a llevar su caso. Diana puso toda su confianza en el abogado británico Anthony Julius, mientras que Carlos optaría por los servicios de la reconocida Fiona Shackleton (actual abogada de la princesa Haya), a quien también se le conoce como 'la magnolia de acero'.
El trato final al que la pareja llegó fue de más de 18 millones de euros como indemnización para Lady Di, así como una pensión anual que sobrepasaba los 400 mil euros. Además de las cuestiones monetarias, Diana conservó algunos derechos como la custodia compartida de sus hijos, la facilidad para usar el Escuadrón Real en sus vuelos oficiales, así como el privilegio de llevarse sus joyas, las cuales, al momento de su muerte fueron heredadas a William y Harry.
Paul McCartney y Heather Mills
El exBeatle y la exmodelo ambientalista se conocieron en 1999 (un año después de que falleciera la primera esposa del cantante, Linda McCartney). En 2002 unieron sus vidas en una boda de ensueño que se llevó a cabo en el castillo Leslie en Irlanda. Poco más de un año después, nació Beatriz, la hija más pequeña del cantante.
Sin embargo, el amor entre Paul y Heather terminaría en 2008 con la firma del divorcio y más de 20 millones de euros que el cantante tuvo que darle a exmujer. La noticia del divorcio de la pareja fue anunciada en 2006. Para llevar sus casos, Heather contrató los servicios de Anthony Julius, quien en 1996 representó a Lady Di durante su proceso de divorcio, y Paul contrató a Fiona Shackleton, quien representó al príncipe Carlos.
Originalmente, la cantidad que la exmodelo demandaba pasaba los 170 millones de euros por lo que llegar a un acuerdo no fue nada fácil, hasta que dos años después Heather aceptó firmar el divorcio por la módica cantidad de 40 millones de euros, cosa que no dejó nada contenta a la exmodelo, pues se cuenta que al término del divorcio, Heather le reclamaría a Fiona y la acusaría de insultarla durante toda la demanda.