Si algo es cierto en todo que sucede en la vida de Meghan Markle, es que le tiene una profunda admiración y un gran cariño a su madre Doria Ragland, una mujer de 64 años de edad que fue maquillista, instructora de yoga y trabajadora social. De hecho, ella fue la única de la familia de Meghan que asistió a la capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor aquel 19 de mayo de 2018 cuando su hija y el príncipe Harry se juraron amor eterno, incluso, de la información que ha surgido desde que los duques de Sussex viven en Estados Unidos, es que Doria se mudó con ellos a la mansión de 14 millones de dólares que compraron en Montecito, Santa Bárbara.
James Arnold, quien se desempeñaba como botones en el Hotel St. Regis en la ciudad de Cleveland en Ohio conoció a Netty quien era la ascensorista, los dos se enamoraron, se casaron y decidieron tener varios hijos, una de ellas fue Jeanette, que durante su vida se casó en dos ocasiones, la primera con Joseph Johnson y la segunda con Alvin Azell Ragland, un comerciante de antigüedades que vendía en mercados de pulgas, ambos procrearon a Doria, la madre de Meghan Markle y después de que nació el 2 de septiembre de 1956 se mudaron a Los Ángeles y tiempo después sus papás se divorciaron.
(Doria Ragland / Getty Images)
Doria conoció a Thomas Markle a finales de los años 70 en Los Ángeles mientras él era iluminador de una telenovela y ella era maquillista en el set. Los dos se casaron en la Self-Realization Fellowship de Sunset Boulevard, un santuario del gurú hindú Yogananda. "Me gusta pensar que él se sintió atraído por sus dulces ojos y su afro, además de su amor compartido por las antigüedades. Sea lo que sea, se casaron y me tuvieron", dijo Meghan a la revista ELLE UK, no obstante, se divorciaron cuando ella tenía dos años de edad.
“Mi madre es instrutora de yoga, pero también hace trabajo social, y trabaja específicamente con la comunidad geriátrica. Para mí, ver este nivel de sensibilidad de toda la vida hacia la crianza y el cuidado, pero al mismo tiempó, mi madre siempre ha sido un espíritu libre. Podemos divertirnos mucho juntas y, sin embargo, todavía encontraré mucho consuelo en su apoyo. Esa dualidad coexiste de la misma manera que lo haría un un mejor amigo”, dijo Meghan Markle en 2017 en una entrevista para la revista Glamour. Leer también: ¿Puede Isabel II quitar los títulos a Harry y Meghan?
(Príncipe Harry y Doria Ragland / Getty Images)
Luego del anuncio de la boda de su hija con el príncipe Harry, Doria tuvo que renunciar a su trabajo en la clínica donde trabajaba porque comenzó a ser muy difícil por la exposición pública a la que fue sometida. Incluso, el encanto de Doria Ragland logró captar la atención de la reina Isabel II, quien la invitó a pasar la Navidad con la familia real en Sandringham, convirtiéndose así en la primera persona que no es miembro de la realeza en ser convocada a esta celebración, de hecho, los Middleton aún no reciben ese privilegio. Leer también: Meghan Markle: "La familia real perpetúa falsedades sobre nosotros"