La disputa entre los duques de Sussex, Canadá y Reino Unido continúa, recientemente se informó que a partir del 31 de marzo, fecha en la que se concrete el Megxit, el país de América del Norte dejará de brindar seguridad a la pareja, dejando una gran deuda sobre los royal y la familia de Enrique de Sussex.
El gobierno canadiense emitió un comunicado en el que confirmó que una vez que los duques de Sussex concreten su salida de la familia real británica, se dejará de brindar seguridad por parte de la policía metropolitana y de la real policía montada de Canadá.
En la declaración del gobierno canadiense se lee: "Como el duque y la duquesa son reconocidos actualmente como personas internacionalmente protegidas, Canadá tiene la obligación de proporcionar asistencia de seguridad según sea necesario".
"La asistencia cesará en las próximas semanas, de acuerdo con su cambio de estado".
A a la par trasciende que el matrimonio ha solicitado la seguridad de la policía metropolitana, ya que de acuerdo con The Sun se sabe que "continuarán exigiendo una seguridad efectiva para protegerlos a ellos y a su hijo", lo que debería recaer en el contribuyente del Reino Unido, además, se alega que "según el perfil público del duque en virtud de haber nacido en la realeza, su servicio militar, el perfil independiente de la duquesa”.
Sin embargo, esto ha preocupado algunos miembros de la policía, quienes aseguraron al mismo medio que temen que se eleve el costo de la seguridad de Meghan y Harry, una vez se haya terminado su labor como miembros ‘senior’ de la familia real, pues se entiende que los oficiales superiores están elaborando un plan de emergencia para duplicar el equipo de seguridad británico que proteja a la familia en América del Norte, pues se sabe que la realeza causa mayor fanatismo de este lado del mundo que en Reino Unido, además, se espera que la pareja gane millones de euros a una velocidad sorprendente, lo que los haría más vulnerables frente al delito.
El exoficial de protección del Met Dai Davies dijo: "En su estado actual, los planes son inviables".
"La situación de Harry y Meghan ha exigido una ruptura completa del libro de reglas y están actuando como si ninguna de las reglas se aplicara a ellos".
"Ya hay una grave falta de oficiales entrenados y esto solo se suma a los problemas del Met".
Por su parte, el palacio de Buckingham se niega hablar de más detalles de la seguridad de los Sussex, pero parece que ha dado un golpe más al matrimonio como represalia a su salida, un caso similar al de la princesa Diana, quien se quedó desprotegida y fue invadida por los medios de comunicación.
Un portavoz de los Sussex dijo: "El Palacio de Buckingham no comenta los detalles del acuerdo de seguridad".