Parece muy probable que el príncipe Andrés de Gran Bretaña se siente en el banquillo por un proceso civil en Nueva York. Acusado de agresión sexual, el hijo de la reina Isabel II pide defenderse ante un jurado por el supuesto abuso sexual de una menor estadounidense en 2001.
En un comunicado hecho público por sus abogados y por el tribunal federal de Manhattan, "el príncipe Andrés exige un juicio ante un jurado de todos los motivos invocados en la denuncia" civil presentada en agosto de 2021 en Nueva York por Virginia Giuffre, de 38 años, que le acusa de haber abusado de ella en tres ocasiones en 2001, cuando era menor de edad.
(El príncipe Andrés ha exigido un jurado / AFP)
En el entorno del también duque de York en Londres se confirma que "el caso será resuelto ante un tribunal". Tras varios intentos en los últimos meses de bloquear y archivar la denuncia de Giuffre, el príncipe Andrés, de 61 años, despojado de todas las funciones oficiales y de sus títulos militares, parece dispuesto a someterse a un juicio civil en Nueva York en un proceso que sin duda tendrá una enorme repercusión para la familia real británica.
Como siempre lo ha hecho, el príncipe niega "categóricamente" punto por punto en el documento judicial de sus abogados las acusaciones de Virginia Giuffre.
Ella, que antes de casarse se llamaba Virginia Roberts y que reside actualmente en Australia, fue víctima del financiero estadounidense Jeffrey Epstein, que se suicidó en la cárcel en 2019, y de su cómplice, la británica Ghislaine Maxwell, reconocida culpable en diciembre en Nueva York de tráfico sexual de menores.
(Andrés de York, Virginia Roberts y Ghislaine Maxwell / AFP)
Giuffre acusa al príncipe Andrés de haber abusado sexualmente de ella en Londres, Nueva York y las Islas Vírgenes estadounidenses, en las residencias de la pareja de depredadores sexuales Epstein-Maxwell, cuando ella tenía 17 años.
No obstante, un eventual juicio en Nueva York no excluye que ambas partes lleguen a un acuerdo financiero extrajudicial, pese a que el abogado de Giuffre, David Boies, había advertido hace dos semanas en la BBC que una simple indemnización no le bastaría a su clienta.
Según la prensa británica, el príncipe saldó recientemente un diferendo por una deuda de 6,6 millones de libras esterlinas (cerca de 8 millones de euros), con la venta de un chalet en Suiza que había comprado en 2014 por unos 21 millones de euros (unos 23,6 millones de dólares). Un proceso en Nueva York podría tener lugar a fines de año.
El pasado otoño boreal, el juez Lewis Kaplan, del tribunal de Mahanttan y que el pasado 12 de enero rechazó el último recurso del príncipe para archivar el caso, adelantó que un proceso civil tendría lugar entre "septiembre y octubre" de 2022.
Según juristas neoyorquinos, Andrés de York tendrá que hacer una declaración bajo juramento en el despacho de un abogado, probablemente en Reino Unido, y responder a las preguntas de la defensa estadounidense de la denunciante.
Sus respuestas serán sometidas después como pruebas ante un jurado encargado de definir una indemnización económica para la denunciante.
(AP)
Según los expertos, el príncipe Andrés tendrá que comparecer en algún momento, ya que de lo contrario, podría ser juzgado en ausencia y de manera "desfavorable".
La demanda por lo civil de Virginia Giuffre no podrá ser convertida automáticamente en una demanda penal por crímenes sexuales. Aunque nada impedirá en el futuro que los fiscales federales estadounidenses inicien diligencias penales contra Andrés si consideran que efectivamente, ha podido perpetrar un delito y si es que todavía no ha prescrito.