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Se calcula que The Weeknd tuvo más de 100 millones de espectadores que estuvieron atentos a su show de medio tiempo del Super Bowl LV. Lejos de la dramática imagen que la estrella musical ha usado para promocionar su más reciente material discográfico, para este momento tan importante, el cantante lució su cara al natural y vestido con un exquisito traje firmado por Givenchy.
Su nombre real es Abel Tesfaye, de 30 años, y se sabe que invirtió 7 millones de dólares para asegurarse de presentar un show que fuera adecuado a la pandemia sanitaria por el nuevo coronavirus y que estuviera a la altura del evento deportivo.
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De su ropa hay mucho qué decir. Su imagen consistió de dos chaquetas y una de ellas fue minuciosamente bordada con miles de cristales de rubí, dio a conocer "Vogue" en exclusiva. "Teníamos al menos cuatro petites mains mágicos trabajando en el bordado en los talleres", dijo al medio Matthew M Williams, "colocándolos uno por uno, asegurándose de que el efecto general fuera uno para atrapar la luz para la gran noche".
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De acuerdo con Williams, el tiempo que le tomó a la casa de moda terminar el saco rojo fue de 250 horas. "En circunstancias normales, mi equipo y yo habríamos viajado de un lado a otro para realizar reuniones", contó, "así que lo hicimos todo a través de Zoom y nos mantuvimos conectados constantemente durante los últimos meses".
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Para darle un toque especial, el cantante combinó su look con zapatos tipo bostoniano de dos tonos y un cinturón con hebilla de la firma Givenchy. "Me atrae tanto diseñar accesorios, ya que rematan un atuendo de una manera tan única", añadió.
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The Weeknd comenzó su show con el tema "Starboy" acompañado de un coro de hombres de gospel, luego interpretó otro de sus éxitos, "I Can't Feel My Face", con la que decenas de bailarines con la cara vendada (y con cubrebocas adaptado) bailaron a su alrededor. "Blinding Lights" fue de ls canciones más esperadas.