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Los pequeños príncipes de Gales, George y Charlotte, sorprendieron este lunes 19 de septiembre al asistir al funeral de su bisabuela Isabel II de Reino Unido, a quien de cariño le decían 'Gan Gan' y que falleció el 8 de septiembre en su castillo de Balmoral, Escocia.
Al ser herederos al trono, los hijos del príncipe Guillermo y Catalina de Gales han demostrado que sin importar su corta edad, ya cuentan con las bases suficientes sobre protocolo y eduación necesaria para atender eventos públicos.
Aunque en la mayoría de eventos la princesa Charlotte, de 7 años, ha dejado claro que tiene un toque natural para el protocolo real y ha sido captada en algunos momentos corrigiendo a sus hermanos, especialmente al príncipe de Louis, de 4 años.
Precisamente este día, Charlotte lo volvió a hacer. La pequeña que lució un abrigo de lana y balerinas de charol en color negro, asesoró a su hermano mayor, George de 9 años, sobre el protocolo que tenía que seguir al tener enfrente el ataúd de su bisabuelita.
El momento ocurrió después del funeral en la abadía de Westminster y antes de iniciar la procesión al castillo de Windsor. "Cuando se vaya al auto, debes inclinarte", fue lo que la pequeña le explicó a George, quien la escuchó atentamente.
De los 2 mil invitados al funeral de Estado de Isabel II, los pequeños príncipes de Gales fueron los asistentes más jovenes, por lo que todo el tiempo estuvieron a un lado de su mamá, Catalina de Gales y de la reina consorte Camila.
Durante el acto fúnebre tanto el príncipe George y Charlotte de Gales se mostraron atentos, sin embargo, al final del mismo, la pequeña de 7 años no pudo evitar comenzar a llorar por su 'Gan Gan', quien alguna ocasión reveló que Charlotte era la que tenía el control entre sus hermanos.