(EFE)
Todo parece indicar que Paulina Rubio se suma a la lista de afectados por la crisis económica. Y es que ante el panorama tan incierto que dejó el 2020, muchos proyectos tuvieron que ser cancelados, entre ellos, los conciertos que podrían ser uno de los principales factores para que la Chica Dorada esté cerca de la bancarrota.
En una investigación realizada por "Ventaneando" se obtuvieron documentos que muestran que la cantante y empresaria no ha realizado los pagos de sus impuestos. Cabe recordar que la intérprete de “Yo no soy esa mujer” tiene una propiedad con vista al mar en Miami, Florida, y que comparte con sus hijos Andrea Nicolás y Eros y con su madre la actriz Susana Dosamantes.
Los documentos de acceso público que se encuentran archivados en la Corte de Miami muestran que Paulina Rubio tiene un adeudo de 117 mil 120 dólares, ocasionados por el impuesto que genera su residencia valuada en casi 7 millones de dólares ubicada en Venetian Causeway.
La residencia fue adquirida en 1996 por tan solo 520 mil dólares, cuando aún mantenía una relación con Ricardo Bofill y quien, además, fue el arquitecto de la mansión que destaca por su propio embarcadero. Evidentemente, con el paso de los años, el terreno incrementó su valor y del 2017 a la actualidad se encuentra valuado en 6 millones 916 mil dólares, cuyos impuestos dejan un total de 117 mil 120 dólares que Paulina no ha pagado.
Ahora bien, el terreno de mil 153 metros no se encuentra registrado a nombre de Paulina Susana Rubio Dosamantes, sino de una de sus empresas. Inicialmente compró la casa bajo el nombre de la compañía “Ananda Florida INC”, en donde tanto Rubio como su madre eran directoras; sin embargo, en el 2015 Ananda quedó inactiva.
Lo anterior dio paso a que en el 2017 el nombre de la casa pasara a “P. Blonde Studios Music and Art, LLC”, también empresa de la cantante. Pero, al igual que en el primer caso, se encuentra inactiva desde abril del 2019 y de la que la Chica Dorada perdió el registro en septiembre del 2020 por no pagar la tasa anual, según informa el diario español "ABC" .
Sin embargo, una de las gotas que estaba por derramar el vaso en la vida de la cantante sucedió en octubre del 2020, cuando "Ventaneando" señaló que una empresa había demandado a Paulina por una deuda de 28 mil 622 dólares; más tarde Informalia reveló que fue American Express con quien la también actriz se había endeudado y también confirmó que la mansión con vista al mar había sido hipotecada.
Y es que los gastos a los que se enfrenta la interprete de “Ni una sola palabra” no sólo se relacionan a lo antes mencionado, sino también al cuidado de sus dos hijos Andrea Nicolás Vallejo Rubio, hijo de Colate, y de Eros Bazúa Rubio, hijo de Gerardo Bazúa.
Además, el enfrentamiento legal al que se ha enfrentado en más de una ocasión con Nicolás Vallejo-Nágera ha representado un gasto significativo para la cartera de Paulina. Mientras que en el caso de Gerardo Bazúa el panorama no es mejor, ya que en el 2020, el cantante demandó a Paulina por no permitir que se reúna con su hijo Eros. Leer también: Paulina Rubio se enfrenta a nueva demanda
Hasta el momento Paulina Rubio no ha hecho declaraciones ni aclaraciones sobre los supuestos adeudos que ha acumulado. Leer también: Esta foto muestra el gran parecido de Paulina Rubio con su hijo Eros