Atreverse y descubrir. Esas son tan sólo dos de las grandes enseñanzas de Corina, la nueva película que este fin de semana se estrena en cines, en la que debuta como directora Ursula Barba Hopfner, y que protagoniza Naian González Norvind.
En entrevista para Revista Clase, las dos artistas detrás de la pantalla nos cuentan la aventura que fue filmar Corina, una película que retrata la agorafobia, es decir, el miedo intenso a situaciones o lugares donde la persona siente que sería difícil escapar o recibir ayuda si ocurre algo inesperado, como un ataque de pánico o una situación embarazosa.
La protagonista llamada Corina, interpretada por Naian, es una joven temerosa, que se enfrenta a diferentes retos. La guapa actriz nos cuenta que se sintió identificada con el personaje debido a su pasión por la literatura. “Me sentí súper identificada. Entiendo la necesidad de escribir, y el amor por los mundos que te brinda la página, porque es la única manera en la que Corina conoce al mundo, conoce el mundo a través de lo que lee”, dijo.
Además, este proyecto es sumamente especial para la actriz de 32 años debido a que llega en un momento en el que en su vida personal comparte ciertos sentimientos retratados en la película. “Curiosamente la vida se encarga a veces de ponerte en la situación en la que mejor vas a entender al personaje y yo estaba pasando por un momento de bastante ansiedad en mi vida cuando filmamos”, nos cuenta.
Sin embargo, la interpretación de Corina es sensible y transmite diferentes emociones, como la preocupación, el miedo, el valor, la valentía y muchos más sentimientos que trae consigo salir de confort, debido a que retrata el trastorno de ansiedad derivado en agorafobia de una manera sutil, valiente y sumamente conmovedora.
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“Un reto fue interpretar a un personaje al que quieres dotar de una condición que no se vuelva caricaturesca pero que tampoco pase desapercibida. Tuvimos que ir modulando matizando hasta dónde llevar el miedo de Corina, y cómo se reflejaba a través de su postura, de su interacción con los demás personajes, cómo se mueve en el espacio, cómo habla, etcétera”, señala Naian González Norvind.
Para Urzula Barba Hopfner, quien se encargó también de la escritura del guión junto con Samuel Sosa, este también fue uno de los retos más grandes, debido al significado de este miedo. “La agorafobia me parece me parece como muy simbólica, me parece que es como una representación de lo que significa de pronto no querer salir de tu zona de confort, no poder salir de tu zona de confort, y me pareció fundamental hablar del miedo en términos cinematográficos”, dice Urzula Barba Hopfner, quien vertió en Corina muchas de sus experiencias personales de una manera cautelosa y poderosa al mismo tiempo.
Corina es una película ambientada en los años noventas en México, pero lo sumamente interesante es la participación y el poder que le da los personajes femeninos para la ambientación de la época. Ese es uno de los aciertos más bellos e inteligentes del filme.
La historia de Corina tiene múltiples personajes con diferentes matices, pero sin duda, tiene una carga importante en las mujeres. “Creo que es un momento en la historia del cine mexicano fundamental, mis colegas mujeres en la industria están haciendo una labor maravillosa (...) Siento que es fundamental representar de forma genuina personalidades y rangos de rangos emocionales a los que nos enfrentamos las mujeres dentro del cine, y demostrar también que las mujeres podemos lidiar con la genialidad”, nos cuenta Urzula Barba.
Este poder también hace feliz a Naian González Norvind, quien relata que, pese a que no es una película que haya tenido una agenda política o social detrás, el elenco, la historia y demás elementos le recuerdan a las grandes mujeres que tiene alrededor.
“Yo creo que en la mitad de mi carrera he sido dirigida por mujeres, mi primera película fue con una mujer. Casi todas las obras de teatro que he hecho en Estados Unidos, el 90% han sido dirigidas por mujeres. Entonces, le debo mi carrera a las mujeres de mi vida”, dice Naian, quien tiene además una herencia familiar importante en el ámbito de las artes, debido a que su mamá, la actriz Nailea Norvind, también tiene una trayectoria admirable en la actuación.
Finalmente, la directora del proyecto, Urzula Barba, cuenta que una de las grandes enseñanzas del filme para ella, fue mantener el corazón abierto. “Me quedó muy claro que si no mantenía mi corazón abierto, si no me mantenía vulnerable y curiosa, las cosas no fluyen. No se convierte en una experiencia creativa, no se convierte en una experiencia de gozo. Por eso, la mayor enseñanza que me dio Corina es mantener el corazón abierto”, dice.
Por su parte, Naian González Norvind aprendió de Corina que los miedos se pueden trascender. “Podemos trascender nuestros miedos, y me recordó la enorme libertad que hay detrás de esos actos de valentía. Corina me recuerda el perfeccionismo, pero me recuerda también a la valentía de soltar, de salir de casa, de decir la verdad”, nos cuenta la actriz.
Corina se encuentra actualmente en cines mexicanos. El guión, escrito por Urzula Barba Hopfner y Samuel Sosa, construye un relato profundamente humano, mientras que la fotografía de Gerardo Guerra resalta la belleza y los contrastes de los paisajes mexicanos, añadiendo una dimensión visual que envuelve al espectador.
La música original de Gus Reyes y Andrés Sánchez Mahler eleva las emociones de la historia con una partitura evocadora, mientras que la edición de José Villalobos y el diseño sonoro de Walter Davis completan la experiencia sensorial de la película.
Protagonizada por Naian González Norvind, el elenco incluye también a Cristo Fernández, Carolina Politi, Laura de Ita, Gerardo Trejoluna, entre otros grandes artistas. Producida por Carlos Hernández Vázquez e Iván López Barba, Corina promete ser un retrato íntimo que resonará en el corazón del público.
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