En la mañana de este miércoles 25 de noviembre de 2020 murió el hombre que es considerado como uno de los mejores jugadores de futbol de la historia del mundo, Diego Armando Maradona. El deceso ocurrió en la casa del barrio San Andrés, en el partido bonaerense de Tigre, donde se había instalado luego de la operación de la cabeza a la que fue sometido en semanas anteriores para quitarle un cuagulo de sangre en el cerebro.
El hombre que cumplió 60 años el pasado 30 de octubre fue campeón mundial con la selección Argentina y murió siendo el entrenador del equipo Gimnasia de La Plata de la primera división de su país natal.
"Quizá su mayor coherencia haya sido la de ser un auténtico en sus contradicciones. La de no dejar de ser Maradona ni cuando ni siquiera él podía aguantarse. La de abrir su vida de par en par y en esa caja de sorpresas ir desnudando gran parte de la idiosincrasia argentina. Maradona es los dos espejos: aquel en el que resulta placentero mirarnos y el otro, en que nos avergüenza", escribió el medio Clarín.
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(El médico Leopoldo Luque y Diego Armando Maradona / AFP)
De acuerdo con medios, un coágulo en su cerebro agravó la salud del exdeportista en los primeros días de noviembre. Los médicos especialistas que se encargaron de su cuidado le detectaron un hematoma subdural y tuvo que ser intervenido de urgencia, por ello, estuvo varios días internado en el hospital. Una semana después, Maradona fue trasladado a una casa en la que recibía cuidados médicos, pero una falla cardiorespiratoria terminó con su vida.
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Leopoldo Luque era le médico de cabecera de Maradona, quien compartió en redes sociales una foto del astro del futbol con señales de mejoría.
Descanse en paz.