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Martha Debayle ha logrado posicionarse como la mujer más escuchada de la radio en México desde hace varios años y además de amasar miles de seguidores en redes sociales, también se ha consolidado como una empresaria en los medios de comunicación.
Aunque es una mujer que no tiene miedo a expresar sus sentimientos con sus cuentahabientes, como ella llama a sus fanáticos, la realidad es que recientemente abrió una faceta poco conocida de ella durante la entrevista que le realizó Yordi Rosado para su canal de YouTube.
(Martha Debayle / Instagram)
En dicha conversación, Martha Debayle confesó que, durante su adolescencia y juventud, atravesó un periodo de lo que hoy se conoce como bullying por su físico. Incluso, sufrió rechazo por parte de la sociedad en la que se desenvolvía debido a que su desarrollo corporal fue más lento que el de otras mujeres, ya que, según lo que contó, su periodo le llegó hasta los 17 años.
“Me sentía gordita y me acuerdo que me decían ‘Martha, hace ejercicio para que se le levanten las nalgas’ y bueno si te lo dicen a los 38 lo aceptas con mucho orgullo, pero cuando eres chiquita te da pena porque estaba yo bastante nalgoncita, ya gran parte de eso ya se fue”, compartió la mujer que hoy tiene 54 años de edad.
(Martha Debayle de niña / Instagram)
Además, la mujer que ha tenido éxito en el radio, la televisión, la revistas y los podcasts, agregó en aquel momento sentía que no encajaba. “Estaba muy chubby y en esa edad pasando por lo que estaba pasando, mi familia, en un país que en ese momento todavía no sabía cómo navegar y veía a todas las chavas de mi colegio con el pelo güero, cuerpazo y yo súper chubby”.
Como ejemplo de lo anterior, Martha contó que durante una fiesta un joven se le acercó para invitarla a bailar y que cuando ella aceptó, dicho joven la rechazó, volteándose entre risas para regresar con sus amigos y burlándose de la ahora locutora.
Para finalizar, Martha Debayle reconoció que perdió mucho tiempo dejando que las personas la hicieran sentir menos y no aceptada: “Ojalá no hubiera perdido tanto tiempo sintiéndome inadecuada como perdí, ojalá me sintiera en ese momento como me siento hoy sobre mí misma porque sí perdí mucho tiempo sintiéndome como un outcast, la gordita, la que nadie pelaba, la que no tenía novio, la que no sacaban a bailar”.