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La Reina del Pop, Madonna, se encuentra transitando uno de los momentos más difíciles de su vida, después de que compartiera el sensible fallecimiento de su hermano Christopher Ciccone, quien falleció a los 63 años después de una dura batalla contra el cáncer.
Christopher falleció este viernes en Michigan, apenas unos días después del fallecimiento de la madrastra de la artista, Joan Clare Ciccone, también a causa del cáncer.
Madonna y su hermano siempre han estado estrechamente vinculados tanto profesional como personalmente. Christopher dirigió varias de las giras y conciertos de la artista, además de desempeñarse como su asistente personal y diseñar parte del vestuario para sus presentaciones alrededor del mundo.
A través de un conmovedor tributo que lanzó en redes sociales, la cantante describió su vida junto a Christopher, quien formó parte de los momentos más importantes de su vida. "Mi hermano Christopher se ha ido. Fue el ser humano más cercano a mí durante tanto tiempo. Es difícil explicar nuestro vínculo, pero surgió de la comprensión de que éramos diferentes (...) Nos tomamos de la mano y bailamos a través de la locura de nuestra infancia", dijo.
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El mensaje que escribió Madonna tras el fallecimiento de su hermano
La Reina del Pop hizo una remembranza de su vida junto a su hermano, pese a que los últimos años de su vida no fueron fáciles. “Hice todo lo posible para mantenerlo con vida el mayor tiempo posible. Sufría mucho hacia el final. Una vez más, nos tomamos de la mano. Cerramos los ojos y bailamos juntos”.
La artista recordó cómo la danza la salvó tanto a ella como a Christopher, especialmente durante su niñez en un pequeño pueblo del medio oeste. Su profesor de ballet, también llamado Christopher, creó un espacio seguro para su hermano en una época y lugar donde ser gay era motivo de estigma.
"Descubrir la danza en nuestro pequeño pueblo del medio oeste me salvó y luego llegó mi hermano, y lo salvó a él también. Mi profesor de ballet, también llamado Christopher, creó un espacio seguro para que mi hermano fuera gay, una palabra que no se decía ni se susurraba en el lugar donde vivíamos."
Además, la artista rememoró cómo Christopher la siguió a Nueva York cuando decidió perseguir su sueño de convertirse en bailarina. "Cuando finalmente tuve el coraje de ir a Nueva York para convertirme en bailarina, mi hermano me siguió (...) Devoramos arte, música y cine como animales hambrientos. Estábamos en el epicentro de todas estas cosas que explotaban."
Madonna también habló los desafíos que enfrentaron juntos, incluyendo la epidemia del SIDA, y cómo siempre encontraron consuelo en la danza. "Bailamos a través de la locura de la epidemia del SIDA. Fuimos a funerales, lloramos y bailamos. Bailamos juntos en el escenario al principio de mi carrera y, con el tiempo, él se convirtió en el director creativo de muchas giras. En lo que se refiere al buen gusto, mi hermano era el Papa y había que besar el anillo para recibir su bendición."
El tributo de Madonna también señaló el talento artístico de Christopher y su valentía para desafiar las normas establecidas, pues dijo que juntos, desafiaron a la Iglesia Católica Romana, a la policía, y a muchas figuras de autoridad.
"Mi hermano estaba a mi lado. Era pintor, poeta y visionario. Lo admiraba. Tenía un gusto impecable y una lengua afilada que a veces usaba contra mí, pero yo siempre lo perdonaba."
A pesar de las dificultades y distanciamientos, Madonna y Christopher siempre encontraron la manera de reencontrarse. En 2001, surgió una pequeña fricción cuando Madonna decidió no contratar a su hermano como director de su gira 'Drowned World Tour', lo que generó descontento en Christopher.
El distanciamiento entre ellos se profundizó en 2008, cuando Christopher publicó un libro de memorias titulado 'Life with My Sister Madonna', en el que revelaba detalles íntimos de su vida junto a la reina del pop.
Sin embargo, la artista describió que siempre se reencontraban y se tomaban de la mano. Incluso, según describió, su relación volvió a estrecharse cuando Christopher enfermó.
Tras su fallecimiento, la Reina del Pop se alegró de que su hermano ya no sufra tras su enfermedad. “Nunca habrá nadie como él. Sé que está bailando en alguna parte”, dijo.
De esta manera, Madonna se despidió de su hermano, y celebró la profunda conexión que compartieron. Esta es una de sus pérdidas más importantes, después de que también sufrió por el fallecimiento de su otro hermano, Anthony Ciccone, quien murió a los 66 años en febrero del año pasado. Anthony también batalló contra el cáncer y una insuficiencia respiratoria.
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