Louis Vuitton presentó en París su última línea de perfumes, cinco creaciones originales del perfumista Jacques Cavallier que han sido trabajadas junto al arquitecto Frank Gehry, diseñador de los frascos. Es la primera vez que Gehry, de 92 años, pone su trabajo al servicio de la belleza, aunque no la primera colaboración con la firma de moda para la que ya creó una línea de bolsos además del célebre edificio de la Fundación Louis Vuitton, a las afueras de París, inaugurado en 2014.
(EFE)
"Dancing blossom", "Cosmic cloud", "Rhapsody", "Symphony" y "Stellar Times" con los cinco nuevos perfumes que Vuitton lanzará el próximo 6 de octubre en sus tiendas y otros puntos de venta seleccionados. Al minimalista tarro de cristal que lleva grabado el nombre del perfume se añade un tapón de metal e imantado, que con su particular forma en movimiento lleva el sello de Gehry, nacido en Canadá y que también tiene la nacionalidad estadounidense.
La idea de movimiento fue la que puso a ambos creadores de acuerdo, pues según Cavallier el movimiento es también una de sus principales como artista y en estos perfumes quería trabajar con extractos pero superando nuevos desafíos: que los olores sean más frescos y que garanticen una larga duración.
"Mi ambición era reinventar los extractos, usar materias primas y sacarles el máximo partido, revelar nuevas facetas, intentar crear nuevos equilibrios o desequilibrios y cuestionar algunas bases del perfume", explicó Cavallier en la presentación.
El perfumista trabajaba desde Grasse (sudeste de Francia) y Gehry desde Los Ángeles. Todo el proceso de concepción se ha hecho a distancia a través de videollamadas. "Era agradable hablar con él sobre belleza y optimismo, porque es el objetivo de estas creaciones", añadió el perfumista, que lleva varios años trabajando en estos perfumes.
El precio de referencia del perfume es de 450 euros (unos 534 dólares, al cambio actual), y a él se añade la posibilidad aún más exclusiva de comprar los cinco en un baúl de la marca diseñado por Gehry, que acaba de estar en Francia para presentar su edificio para la Fundación Luma, en Arles (sureste).