La última publicación de Alejandro Fernández en su perfil de Instagram causó un verdadero revuelo en todas las plataformas sociales, pues además de lucir un atuendo valuado en más de 50 mil dólares que consta de una camisa de Dolce & Gabbana y un reloj Rolex, el hijo de don Vicente Fernández llamó la atención por su apariencia, incluso, hubo quienes no dudaron en llamarlo "señora de las Lomas".
Con la mirada perdida en el horizonte, la boca elegantemente perfilada y el pelo canoso con ligeras ondas marcadas, "El Potrillo" fue motivo de un sinfin de memes.
Alejandro Fernández, de 51 años, se encuentra de paseo en Italia acompañado de su novia, de 31 años, con quien tiene un noviazgo desde el 2011. Karla Laveaga Vuilleumier es una influencer que llamó la atención de todos al convertirse en novia del cantante, luego de que éste terminara su larga relación con la guapa Ayari Anaya. Ella nació en Guadalajara, Jalisco, el 20 de septiembre de 1991.
"El Potrillo" nunca ha abordado los rumores que existen sobre su sexualidad, al contrario, parece que todo el palabrerío que corre en redes sociales lo impulsan a seguir siendo disruptivo con su manera de vestir.
El hecho de que en esta ocasión lo hayan comparado con las "señoras de las Lomas" es quizá por su manera de lucir con peinados esponjosos, prendas de alta costura con detalles gigantes y accesorios de oro llamativos.
Aunque muchos aprovecharon el momento para lanzar bromas sobre la apariencia de Alejandro Fernández, uno de los exponentes de música ranchera más famosos de México, otros salieron en su defensa por reirse de él y no de famosos como Harry Styles, quien también ha roto las barreras de género con su manera de apropiarse de las tendencias de moda.
"¿No será que Alejandro Fernandez está creando una nueva masculinidad y eso les incomoda? Pregúntese", escribió uno de sus seguidores en Twitter.
"Pues a mi me encanta ver que Alejandro Fernández al fin es libre de ser lo que le da la gana. Imaginen el horror de vivir bajo el cliché del ranchero macho mexicano", "Harry Styles y Bad Bunny tienen un público meta joven que se identifica con su manera de vestir, quienes lo aplauden forman parte de ese público. Alejandro Fernández tiene un público meta de personas que crecieron con prejuicios al respecto, y por eso les molesta verlo así" y "Algo anda mal en este mundo cuando ves a Alejandro Fernández convertirse en toda una diva francesa, mientras resulta que Lorena Herrera es todo un caballero", son algunos de los comentarios que se leen.