Miguel Bosé ha comenzado a retomar sus actividades y en medio de su regreso a las redes sociales y la polémica entrevista que le concedió a Jordi Évole para su programa “Lo de Évole”, el cantante no quiso perder la oportunidad de compartir con su casi millón de seguidores en Instagram que visitó la pirámides de Teotihuacán, uno de los destino turísticos más importantes del país, no obstante, lo que más sorprendió a propios y extraños es que no lo hizo solo, fue con sus cuatro hijos Tadeo, Diego, Ivo y Telmo.
La instantánea que publicó Bosé muestra a los cuatro niños de 10 años de espaldas y señalando a la Pirámide del Sol, la cual está de fondo en la imagen. “Una mañana de arqueología con mis cuatro amores. Teotihuacán y aquí señalando la pirámide del sol. Historias apasionantes”, escribió Miguel para acompañar su publicación. Esta imagen se convierte en la primera que el cantante sube a las redes sociales de sus hijos luego de más de siete meses en los que se mantuvo alejado de estas plataformas digitales después de causar polémica internacional por su postura respecto a la pandemia provocada por el Covid-19.
Además, el reencuentro de los pequeños de 10 años habla de que poco a poco avanza la batalla legal en la que se encuentran Miguel y Nacho Palau desde hace varios meses, cuando el segundo demando al primero la filiación de los cuatro niños que ambos decidieron procrear a través de la subrogación de vientre. A pesar de que en octubre de 2020 un juez de Pozuelo de Alarcón le negó a Nacho la filiación de los niños, este y sus abogados decidieron gestionar un recurso de apelación en la Audiencia Provisional de Madrid para escalar el asunto legal.
Mientras eso se resuelve, Nacho permitió que los niños viajaran a México para reunirse con sus hermanos en la casa que Miguel Bosé habita en la capital del país. Tadeo y Diego son los dos hijos que tienen la sangre y los apellidos de Bosé, mientras que Ivo y Telmo, de Palau, mismos que fueron separados el año pasado cuando el intérprete de “Amante bandido” quiso venirse a vivir a tierras aztecas y Nacho no. Leer también: Miguel Bosé llegó a consumir dos gramos de cocaína diarios
Bosé y Palu mantuvieron una relación por 26 años, misma que el cantante mantuvo alejada de los reflectores hasta que salieron a relucir los problemas de la filiación de los niños. Según Lola Medina, mamá de Nacho, su hijo conoció a Miguel a los 19 años en una discoteca de Valencia, a partir de ese flechazo Nacho dejó todo por ir a Madrid con Bosé, pero ella fue la que aseguró que los problemas empezaron con la decisión de Miguel de radicar en México. Leer también: "A mi madre se le sedó hasta la muerte", la incendiaria declaración de Miguel Bosé