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Hace poco más de seis meses, Kourtney Kardashian se convirtió en madre del pequeño Rocky, su primer hijo junto a Travis Barker, baterista de Blink-182. Aunque esta nueva etapa en su vida familiar la llenó de dicha, también trajo consigo algunas preocupaciones, las cuales se presentaron sobre todo en la recta final y orillaron a la empresaria a someterse a una importante cirugía.
Kourtney Kardashian habló de cómo vivió su embarazo a los 44 años
Durante todo su embarazo, la empresaria estadounidense se mostró dispuesta a compartir los pormenores de esta etapa, especialmente sobre cómo atravesó la gestación teniendo 44 años, con todas las complicaciones que la edad puede traer. Por lo que en esta ocasión se decidió a hablar abiertamente de su experiencia como paciente de una operación prenatal de emergencia.
Estas confesiones llegaron de la mano con el nuevo capítulo de The Kardashians, que en esta ocasión fue protagonizado por Kourtney y Travis Barker, su esposo. Entre las revelaciones que la famosa pareja hizo, destacaron aquellas en las que profundizó sobre los temores que la inundaban previo a la llegada de su bebé, pues a pesar de que siempre procuró tener todo bajo control para evitar incidentes, aun así tuvo que lidiar con imprevistos que pusieron en riesgo su salud y la de su hijo, algo que por momentos, transformó esta mágica espera en algo "aterrador".
¿Por qué operaron de emergencia a Kourtney y a su bebé?
Según los dichos de la mayor de las hermanas Kardashian, poco antes del día del parto, tuvo que ser ingresada de emergencia al quirófano para que se le realizara una cirugía fetal. El propósito principal de esta intervención era "drenar" el líquido que se había alojado en los pulmones de Rocky, ya que tal como le explicaron los médicos, además de ser una condición que podía tornarse más grave, también era poco común, por lo que les recomendó que no perdiera tiempo.
"Fue muy extraño que tuviera esto, pero también es raro y afortunado que lo hayamos detectado. Gracias a Dios por esta operación exitosa. Honestamente, estoy muy agradecida, no tengo palabras", se sinceró Kourtney, quien en todo este proceso estuvo acompañada de su familia, lo que le dio el empuje que necesitaba para mantenerse fuerte por baby Rocky.
Después de este "aterrados" momento, el pequeño ha crecido saludablemente e inund de dicha a sus padres y a sus medios hermanos. Recordemos que la socialité es mamá de tres hijos con Scott Disick; Mason, Penelope y Reign. Mientras que el músico es papá de dos adolescentes llamados Landon y Alabama.
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