(AFP)
Jennifer Lawrence, actriz estadounidense que se caracteriza por mantener su vida bastante privada, protagoniza la más reciente portada de la revista "Vogue" en la que habla por primera vez sobre su maternidad y lo mucho que su vida ha cambiado.
Hasta antes de la entrevista con la publicación, la actriz de 32 años había decidido ser hermética sobre su embarazo, incluso en su momento declaró: “Cada instinto en mi cuerpo quiere proteger su privacidad por el resto de sus vida, tanto como pueda. No quiere que nadie se sienta bienvenido a su existencia. Y siento que eso comienza con no incluirlos en esta parte de mi trabajo”.
(La actriz desfiló por la alfombra roja de su película "No miren arriba" con un vestido Dior de lentejuelas para mostrar su avanzado estado de gestación / AP)
Sin embargo, en febrero de este año, el sitio "TMZ" anunció que la protagonista de la saga "Los juegos del hambre" se había convertido en mamá primeriza de un bebé nacido en Los Ángeles, California.
Fue hasta ahora que Jennifer Lawrence decidió compartir que el primer bebé de su matrimonio con el galerista Cooke Maroney, con quien está casada desde 2019, es un pequeño niño llamado Cy, en honor a Cy Twombly, un pintor estadounidense.
"La mañana después de dar a luz, sentí que toda mi vida había comenzado de nuevo. Pensé, ahora es el primer día de mi vida. Estaba tan enamorada, me enamoré de todos los bebés en todas partes. Los recién nacidos son increíbles. Ahora amo a todos los bebés" expresó la actriz en su entrevista.
Aunque la actriz aseguró encontrarse en la mejor etapa de su vida, también reveló que la maternidad la ha hecho reflexionar en muchos aspectos, incluyendo el tema de armas y aborto en Estados Unidos, este último cercano a ella debido a que experimentó dos pérdidas.
"Tuve un aborto espontáneo cuando tenía 20 años en Montreal", confesó Jennifer Lawrence, y agregó que la segunda pérdida ocurrió cuando filmaba la película "No miren arriba", que protagoniza junto a Leonardo DiCaprio.
Actualmente, Jennifer Lawrence, que ganó un Oscar a mejor actriz en 2012, se encuentra promocionando su nueva película llamada "Causeway", en el que interpreta a una soldado estadounidense después de una lesión cerebral traumática en Afganistán.