(MEGA / Instagram: nataagataa)
Alboroto es lo que ocurrió el pasado 13 de noviembre en la Santa Sede luego de que la modelo Natalia Garibotto escribiera en Twitter “Al menos voy al cielo”, a la publicación de un corto video donde se mostraba claramente que la cuenta oficial del papa Francisco le diera un like a una de sus fotos en la que aparece vesrida en lencería de colegiala, la cual publicó el pasado 5 de octubre.
Esta acción rápidamente fue revertida por las personas que manejan las cuentas del Sumo Pontífice a pesar de que el error estaba hecho, no obstante, el Vaticano no se quedó de brazos cruzados y el pasado viernes 20 de noviembre solicitó a Instagram su ayuda para saber quién o cómo es que se dio esta reacción desde la cuenta oficial del papa, ya que la Oficina de Prensa de la Santa Sede se enteró del acontecimiento luego de recibir la llamada de la Agencia Católica de Noticias para preguntar su opinión sobre lo sucedido.
“Estamos en contacto con Instagram para averiguar qué sucedió”, expresó este mismo viernes el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni a CNN, uno de los medios de noticias más importantes de Estados Unidos. Asimismo, Facebook, empresa propietaria de Instagram, aclaró que está ayudando al Vaticano para investigar este asunto.
En medio de la polémica, se dio a conocer que las redes sociales del papa Francisco son gestionadas por personal adscrito al Vaticano y no directamente por el obispo de Roma, por lo que se pusieron sobre la mesa dos escenarios: un error del equipo de comunicación o hasta un montaje.
La cuenta oficial del papa tiene más de 7 millones y medio de seguidores mientras que él no sigue a nadie. Por su parte, la modelo brasileña tiene más de dos millones de seguidores y más de 700 publicaciones, en la mayoría aparece con diminutos trajes de baño y con disfraces muy provocadores como el que recibió el supuesto “me gusta” de la cuenta del papa.