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El pasado mes de abril, Debanhi Susana Escobar, joven del estado de Nuevo León, salió a una reunión y no regresó a su hogar. El caso, además de provocar gran conmoción en México, llegó a países como Estados Unidos y Argentina.
La joven que fue encontrada sin vida 11 días después de su desaparición, tenía 18 años e iba a iniciar el tercer semestre de Derecho en la Universidad de Nuevo León, instalaciones a las que nunca pudo acudir de forma presencial por la pandemia y en las cuales sus compañeros le rindieron un homenaje luctuoso al inicio del curso.
Desde el momento de su desaparición, además del inmenso esfuerzo que sus papás, Mario Escobar y Dolores Baldazúa, estaban realizando para encontrarla, en redes sociales había cientos de publicaciones de apoyo, solidaridad y ayuda, los cuales tristemente no rindieron frutos.
El día de hoy, de haber podido regresar a su casa, Debanhi estaría cumpliendo 19 años y tal como compartió su papá el año pasado, habría tenido una celebración familiar, con amigos y con muchos anhelos por cumplir.
(Facebook)
"Espero se cumplan todos sus sueños, así como su andar en esta época difícil, pero sabe que siempre estaremos para ella. Te amamos Debanhi" escribió su papá junto a una foto en su cumpleaños número 18, el último que celebrarían juntos.
Los restos de Debanhi descansan junto a un mural suyo, rodeados de flores en una tumba ubicada en un municipio rural al sur de Monterrey. Mientras que en su casa, sus papás decidieron mantener su habitación intacta para poder recordarla.
La última versión de la Fiscalía de Nuevo León es que Debanhi murió de forma accidental, aunque después se realizaron más autopsias que revelaron que falleció por sofocamiento. Hasta el momento, siguen existiendo demasiadas interrogantes.
Finalmente, su papá no se ha rendido y sigue buscando justicia. En una entrevista para "Infobae", confirmó que recibe amenazas, aunque seguró que "No tengo miedo a nada. No tengo miedo a la muerte. Si me llega la muerte ahorita no me interesa".