El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, cumplió 60 años el pasado 4 de agosto y organizó una fantástica y muy polémica fiesta en su honor en una majestosa casa ubicada en Martha's Vineyard, a la que asistieron personalidades de la talla de Beyoncé y George Clooney y su esposa Amal.
Sin embargo, Meghan Markle se habría quedado con las ganas de ser la invitada especial de la noche, de acuerdo con la biógrafa Angela Lavin.
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Pese a que se sospechaba que Meghan tendría buenas conexiones con los Obama, lo cierto es que la exfamilia presidencial estadounidense habría preferido dar un paso atrás luego de las explosivas declaraciones de los duques de Sussex contra la familia real del Reino Unido.
Angela Levin, quien escribió "Harry: Biography of a Prince", comentó que Barack y Michelle no invitaron a la actriz y al príncipe en una decisión de refrendar su lealtad hacia la reina Isabel II y también han brindado su apoyo al príncipe William, futuro rey del Reino Unido y hermano de Harry.
"Los Obama claramente siempre consideraron muy bien a Harry pero estoy segura de que están examinando a Meghan", reportó "Daily Mail".
(EFE)
Lavin continuó: "Me dijeron que a pesar de afirmar que no pudo asistir, Meghan en realidad quería desesperadamente ser la invitada especial a la increíble fiesta de Obama pero el hecho es que Harry y Meghan ni siquiera estuvieron en la lista original".
Meghan y Harry anunciaron que se darían de baja laboralmente durante varias semanas para disfrutar de su hija recién nacida, Lilibet Diana, pero en el cumpleaños de la duquesa, ella lanzó su iniciativa 40x40, la cual se centra en ayudar a las mujeres a volver al trabajo después de la pandemia. Este proyecto fue bien recibido por algunas celebridades como Adele y la política Hillary Clinton.