Ubicado en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, el rancho Los Tres Potrillos es un símbolo del legado de Vicente Fernández, uno de los íconos más queridos de la música ranchera mexicana. Fundado en 1980, año en donde el cantante se encontraba en la mejor etapa de su carrera como actor y cantante. El rancho fue nombrado en honor a los tres hijos varones de Vicente: Vicente Jr., Gerardo y Alejandro.
El lugar fue concebido como un refugio familiar, además de permitir que cantante pudiera criar caballos, una de sus grandes pasiones. Desde sus inicios, el rancho ha sido un testimonio del amor de Vicente por el campo y la vida rural. Con una extensión de más de 500 hectáreas, la propiedad cuenta con una capacidad de albergar aproximadamente a 11 mil asistentes en las que se puede encontrar un campo de rodeo para competencias internacionales.
El rancho alberga diversas instalaciones que reflejan el estilo de vida y las pasiones del histrión. Fue su hogar hasta el día de su partida, donde vivió con su familia y junto al amor de su vida, su esposa María del Refugio Barca, conocida como Doña Cuquita. Hoy en día, está abierto al público para que todos puedan explorar y aprender más sobre la vida de este icónico personaje de la música mexicana.
Con el tiempo, el rancho se ha convertido en un lugar imprescindible para los fanáticos de la familia Fernández. Entre sus atracciones se destacan una alberca con forma de guitarra, un área para espectáculos, una tienda de ropa vaquera y caballerizas con diversos tipos de caballos.
Además, a lo largo del rancho se pueden encontrar diversas representaciones que rinden homenaje al charro. Al entrar, se siente una atmósfera rústica y acogedora que te hace sentir como en casa, reflejando en su totalidad la vida en el campo.
Meses antes de su fallecimiento (diciembre de 2021), Vicente Fernández declaró a través de su cuenta de Facebook: "Quiero que sepan que esta es su casa y yo no cobro por la entrada ni por las fotos. Aquí no hay ningún museo, los recibo con gusto en mi rancho, no por obligación o negocio. Salgo a saludarlos cuando puedo y lo hago de corazón". Gracias a estas palabras, hasta el día de hoy la entrada al rancho es completamente gratuita. Además, dentro del recinto se ofrecen diversas actividades para disfrutar.
La residencia principal del rancho es una casa estilo hacienda, decorada con un gusto exquisito que combina elementos tradicionales mexicanos con toques modernos. La casa está llena de recuerdos y memorable de la carrera de Vicente Fernández, incluyendo discos de oro y platino, premios y fotografías históricas. No obstante, no se permite el acceso a los visitantes por cuestiones de seguridad y privacidad.
Uno de los atractivos más destacados del rancho son las caballerizas y las pistas de equitación. Vicente Fernández es conocido por su amor por los animales, en el rancho se crían y entrenan caballos miniatura y de pura sangre. Las instalaciones incluyen establos de primer nivel, pistas de entrenamiento y un área especial para la crianza de caballos.
En el corazón del rancho se encuentra una capilla privada donde la familia Fernández celebra misas y ceremonias religiosas. La capilla, construida con un estilo colonial, es un lugar de paz y reflexión, decorado con arte sacro y vitrales. Recientemente, Vicente Fernández Jr. celebró su boda con Mariana González.
El restaurante, inaugurado en noviembre de 1999 con el mismo nombre del rancho, es parte integral de este. Desde entonces, se especializa en la preparación de platillos típicos jaliscienses y ofrece espectáculos en vivo junto con bailes regionales.
La Arena Vicente Fernández Gómez, inaugurada en 2005 y ubicada junto al rancho, es un centro de espectáculos de renombre que ha acogido a destacados artistas como Katy Perry, Roger Waters y Depeche Mode. Además de ser sede de eventos deportivos y exposiciones importantes, cuenta con una capacidad para 15 mil personas.
Don Vicente llegó a ofrecer conciertos privados en el rancho y en la arena para amigos y familiares, creando momentos inolvidables para los asistentes. Además, el rancho ha sido el lugar de celebración de bodas, cumpleaños y otras festividades de la familia Fernández.
El rancho Los Tres Potrillos no solo es una propiedad rural, sino un emblema de la vida y la carrera de Vicente Fernández. Su historia, sus instalaciones y los eventos que allí se llevan a cabo son un reflejo del amor del cantante por su tierra y su familia por lo que su legado continúa inspirando a generaciones de mexicanos y amantes de la música ranchera.
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