Más Información
El exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin, abrió la caja de pandora con la denuncia que presentó el pasado 11 de agosto de 2020 ante la Fiscalía General de la República, en la que no sólo revela la presunta corrupción que se generó en el sexenio de Enrique Peña Nieto con el caso de Odebrecht y Agronitrogenados, sino que pone sobre la mesa un tema particular de exmandatario, la construcción de un “Museo del Presiente”, en el Estado de México, a la par que la edificación que es mejor conocida como “La Casa Blanca de Enrique Peña Nieto”.
Según lo que expone Emilio Lozoya en su denuncia, desde el inicio de la presidencia de Peña Nieto, se le instruyó que desde Pemex se contrataran los servicios de un fotógrafo quien tomaría las fotografías en los eventos relevantes del mandatario y que cobraría entre dos y tres millones de pesos mensuales. Pero no era todo, ese material formaría parte de un “Museo del Presidente” que formaba parte de una casa que estaba en construcción en el Estado de México, lugar de donde Peña Nieto fue gobernador de 2005 a 2011. Leer más: La esposa de Emilio Lozoya sigue con estatus de prófuga
(EFE)
“A finales de 2015, durante un evento con Enrique Peña Nieto, Antero Rodarte (quien manejaba el dinero en efectivo del Presidente) me comentó que la casa y el museo estaban concluidos y que ahí se colocarían los regalos, reconocimientos y el historial del Presidente, pero que por ese entonces sólo él y (Roberto) Padilla Domínguez (secretario técnico del gabinete) conocían la ubicación del inmueble”, fue parte de la declaración de Lozoya Austin.
Se sabe que la construcción del inmueble al que hizo referencia Emilio corrió a cargo de Grupo Higa, misma empresa que construyó la casa de Sierra Gorda número 150 en la Lomas de Chapultepec. Emilio Lozoya aseguró que en una reunión con Juan Armando Hinojosa Cantú, propietario de dicha empresa, le informó que necesitaba hacer negocios con Pemex para que tuviera liquidez, ya que estaban construyendo una “Egoteca” y aunque Lozoya dijo no entender en ese momento a qué se refería el empresario tiempo después supo que se refería a la casa museo. Leer más: Eduardo Videgaray defiende a su hermano tras declaraciones de Emilio Lozoya
(El Universal)
Para afianzar la historia del “Museo del Presidente”, Emilio contó en su denuncia que en el marco del Día de la Marina que el gobierno federal conmemoró en el estado de Veracruz, al pie de las escalinatas del avión presidencial Javier Duarte —entonces gobernador del estado y actualmente detenido en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México—, le entregó un folder al presidente Peña Nieto quien al estar arriba en el avión les dijo s sus colaboradores: “Miren lo que me regaló el gober” y les enseñó las fotografías de un Ferrari rojo, una lleves de coche y un texto que decía “Este Ferrari perteneció al presidente López Mateos”.
Según Lozoya, Antero Rodarte le confirmó a él que este vehículo ya se encontraba en las instalaciones del museo que se mandó a construir el presidente.