Después de que se revelara que el teléfono del CEO de Amazon, Jeff Bezos, fue hackeado a través de un mensaje del número personal del royal heredero Mohamed bin Salmán, en 2018, expertos de la ONU han solicitado este miércoles que se investigue la presunta participación del príncipe de Arabia Saudita en este caso.
El diario The Guardian explicó que el teléfono del empresario y dueño también del diario The Washington Post fue intervenido por piratas cibernéticos luego de haber recibido un archivo del celular de Mohammed bin Salman, a quien se le ha relacionado con la desaparición de la princesa Basmah de Arabia Saudita.
“La información que hemos recibido sugiere la posible implicación del príncipe heredero en la vigilancia del señor Bezos, en un intento de silenciar la cobertura de The Washington Post respecto a Arabia Saudita. Estas acusaciones son también relevantes para la actual evaluación de las denuncias sobre la participación del príncipe heredero en el asesinato del periodista saudí de The Washington Post, Jamal Khashoggi, en 2018”, constatan en un comunicado los expertos independientes Agnès Callamard, relatora especial de la ONU para las ejecuciones sumarias y extrajudiciales, y David Kaye, relator especial de la ONU para la libertad de expresión.
Del mismo modo, después de que The Guardian reveló que el teléfono de Bezos había sido pirateado con un archivo dañado y enviado desde el número del príncipe heredero de Arabia Saudita, con quien el empresario estadounidense mantenía una supuesta amistad, se dijo que este hackeo también tuvo que ver con que ocho meses después The National Enquirer expusiera el romance extramarital de Bezos con Lauren Sánchez, en enero de 2019, y cinco meses antes murió Jamal Khashoggi.
Asimismo, de acuerdo con los expertos de la ONU, el presunto ataque a la privacidad de Bezos probablemente se llevó a cabo con productos de espionaje como el Pegasus de la empresa israelí NSO (mismo que fue el centro del escándalo en México en 2017 por supuestamente espiar a periodistas y defensores de los Derechos Humanos), ya que presuntamente este malware es capaz de vigilar a través del micrófono y la cámara del celular.
Ante estas serie de acusaciones, los portavoces de Arabia Saudita se han encargado de negar categóricamente que el príncipe Mohamed Bin Salmán, a quien también se relaciona de manera sentimental con la actriz Lindsay Lohan, esté relacionado con este caso de espionaje.
“Pienso que absurdo es exactamente la palabra adecuada. La idea de que el príncipe heredero pirateara el teléfono de Jeff Bezos es absolutamente estúpida”, ha declarado el ministro de Exteriores saudí, el príncipe Faisal Bin Farhan al Saud, al ser preguntado sobre el asunto por la agencia Reuters en Davos.
Por otro lado, las relaciones entre Bezos y el gobierno saudita parecían ir ‘viento en popa’ y ser bastante prometedoras, además, el presidente Donald Trump eligió Arabia Saudita como su primer destino en el extranjero como presidente, y Mohammed visitó los Estados Unidos a principios de 2018, y la compañía de Bezos continuó sus esfuerzos para llegar a un acuerdo de mil millones para construir tres centros de datos a cargo de Amazon Web Services en el territorio saudita.
Sin embargo, luego de esto, Trump intensificó sus críticas al CEO de Amazon y por medio de un tuit aseguró que "pondrá mayor atención" a los esfuerzos de Amazon por ganar un contrato de computación en la nube del Departamento de Defensa. El contrato de 10 mil millones fue otorgado a Microsoft en octubre. Amazon presentó una queja legal el mes pasado diciendo que perdió el contrato porque Trump había aplicado una "presión inadecuada" contra Amazon Web Services, esto de acuerdo con The Washington Post.