Más Información
Tras una larga espera para los amantes del deporte motor, este fin de semana por fin se celebrará el Gran Premio de México. Mientras los fanáticos se frotan las manos por saber si el piloto británico Lewis Hamilton podrá conquistar otro título, en redes sociales los campeones son sus mascotas: Roscoe y Coco, unos adorables bulldogs que juegan, vacacionan y acaparan reflectores cuando acompañan a su orgulloso 'padre' al trabajo.
La fama de Roscoe y Coco despuntó hace algunos años con la apertura de su propia cuenta de Instagram ( @roscoelovescoco ) que, de momento, suma más de 160 mil seguidores. En varias ocasiones, Lewis Hamilton, campeón de la F1, ha declarado su amor incondicional por los animales, lo cual heredó de sus padres, quienes acostumbran tener varios perritos en casa.
En 2013, la estrella de la escudería Mercedes dio la bienvenida a Roscoe y Coco y, desde entonces, ni su agenda, que puede llevarlo de un continente a otro, ha sido pretexto para descuidarlos. De hecho, los perros de Lewis Hamilton, campeón de la Fórmula 1, cuentan con pasaporte y acreditaciones que les permiten pasear por el paddock antes de las carreras de Lewis.
No es tan común ver a Coco en público porque nació con varias complicaciones de salud. Hace un par de años, Lewis Hamilton compartió en una publicación de Instagram que “es epiléptica, su lengua es demasiado larga, tiene una pelvis subdesarrollada y padece displasia en las patas delanteras”, aunado a otros problemas óseos. La dueña original no guardaba esperanzas para la cachorrita, pero el piloto se opuso a que la 'durmieran' y la adoptó.
En la actualidad, esta “perezosa” perrita recibe tratamiento láser en sus articulaciones, fisioterapia y acupuntura. Eso no le impide divertirse de vez en cuando, aunque sus actividades favoritas son comer, ser mimada y roncar a todo pulmón. Además de que Lewis Hamilton es un verdadero campeón de la F1, también es dueño de un corazón enorme.