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Tiger Woods es uno de los hombres deportistas más ricos del mundo, no por nada su fortuna es de 800 millones de dólares según la publicación de diciembre de Forbes, lo que le dio el lugar número nueve en el listado anual de la revista.
Lo anterior implica que su patrimonio aumentó 50 millones aproximadamente, de los cuales cinco millones y medios obtuvo por su participación en 18 torneos; más el millón 188 mil dólares por ganar el segundo lugar en el PGA Champioship, y su victoria en el Tour Championship que le valió un ingreso de un millón 620 mil dólares.
A ello se le suma que sus ingresos anuales sean de aproximadamente 42 millones de dólares gracias a sus patrocinadores, los cuales son Nike, TaylorMade, Monster Energy, Hero MotoCorp y Kowa.
Pero el golfista, además tiene un lado empresarial, ya que cuenta con tres negocios: el primero es TGR Live Events, su línea de asistencia a eventos, clínicas premier y su clásico torneo Tiger Woods Invitational. El otro es TGR Design, marca que se enfoca en la creación y diseño de campos de golf, así como la organización de nueve cursos para campos.
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Por último, está la parte más social que deportiva con su restaurante The Woods Jupiter, el cual está ubicado en Harbourside Place, Estados Unidos.
Pero más allá de sus negocios o triunfos, una de las grandes adquisiciones del deportista es su propiedad en Jupiter, Florida, su casa está valuada en nada más y nada menos que 55 millones de dólares. Ésta no solo tiene dos albercas y un montón de habitaciones, sino que también cuenta con un campo de golf para el solito.
Además, tiene cinco lujosos autos, un Cadillac Escalade (80 mil dólares); un Buick Enclave (40 mil dólares); un Porsche Carrera GT (895 mil dólares); un Lexus LS 460 Sedan (60 mil dólares); y su Mercedes-Benz S65 (170 mil dólares).
Por si fuera poco, el millonario también es propietario de un yate privado que vale 20 millones de dólares y mide 47 metros de largo.
Y eso no es todo, pues es dueño de un jet privado Gulfstream G550 que está valuado en poco más de 61 millones.
Aunque la vida del golfista, que está de visita en nuestro país, no ha estado llena de triunfos y ganancias; en 2010 se divorció de Elin Nordegren, cuya separación estuvo marcada por la cantidad de 750 millones de dólares, lo que le valió el título de la ruptura más cara en la historia del deporte.