Cerca de mil asistentes vestidos de blanco, según el dress code sugerido, participaron en las actividades programadas, que incluyeron pisa de uvas y catas de algunas de las etiquetas más conocidas de la bodega Cuna de Tierra. Asimismo, hubo un taller gustativo con chocolate artesanal, exhibición de cocina al aire libre, así como degustación de puros y maridajes que sorprendieron a los presentes. Los invitados también pudieron disfrutar recorridos por el viñedo a bordo de carretas y tomarse selfies a sus anchas en medio de las viñas recién vendimiadas para producir las 19 etiquetas que ofrece la bodega.
Durante la comida, hubo buffet de charcutería, quesos, frutas, ensaladas y panes artesanales, para dar paso a un menú de cuatro tiempos. Como acompañamiento, se maridaron los alimentos con el vino Torre de Tierra blanco, el tinto M3 y destilados premium.
La experiencia fue amenizada por varios grupos musicales en vivo y, más tarde, un Dj y un espectáculo de alebrijes gigantes luminosos que fueron la mayor atracción de la noche.