El flechazo entre Letty y Pedro se dio en febrero de 2020, cuando se conocieron en un restaurante y, aunque después de eso se vieron obligados a permanecer separados cuatro meses y medio debido a la pandemia, tras su reencuentro en Cancún, iniciaron un noviazgo que los puso a viajar continuamente entre Los Cabos y Argentina. Dos años y nueve meses después, se comprometieron.
Para su boda, Letty deslumbró con un vestido Winnie Couture personalizado y Pedro se lució con un smoking hecho a la medida, del sastre argentino Nicolás Zaffora.
Durante la ceremonia, los novios intercambiaron regalos: él le entregó a Letty un par de pendientes de diamantes Cartier que representan el brillo que emanan como pareja, mientras que ella le entregó a Pedro un Rolex que simboliza el tiempo que tuvieron que permanecer separados pero que les dio claridad acerca de su destino juntos.
La señora Leticia González, madre de la novia, tomó el micrófono para leer “Si no amo, nada soy” de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corintios, mientras que, por su parte, su padre Ernesto Coppel, dedicó un mensaje a la pareja recordándoles el valor y relevancia de construir una relación sólida que los mejore como personas.
Al final del enlace, los esposos invitaron a disfrutar de un coctel previo a la cena y que tuvo lugar en una terraza con vista al mar, dentro de la propiedad de Letty, quien fuera Señorita Sinaloa 1991 y tercer lugar en el certamen Señorita México de ese mismo año.
Haciendo una entrada triunfal después de protagonizar varias sesiones de fotos, la mexicana y el argentino fueron recibidos con “Pero te conocí”, canción que fue interpretada en vivo por el cantante Jesús Navarro, vocalista de la agrupación Reik.
Durante la velada se sirvió Tártara de atún, Crema de espárragos blancos, Short rib con puré de papa y verduras del huerto, Pastel de zanahoria o New York cheesecake, menú preparado por la chef Gabriela Sanz.
Un cielo completamente iluminado por las explosiones de fuegos artificiales y “Cuando calienta el sol” de Luis Miguel sonando en la pista, fueron el arranque de la fiesta en la que se pudo ver a la hermana de la novia, Bárbara Coppel y a su esposo el ex torero Alejandro Hank, bailando entre los entusiastas amigos que llenaron de alegría la noche para los enamorados.