Juan José Álvarez Brunel, secretario de Turismo de Guanajuato, aplaudió que en la entidad siga la tendencia de crecimiento y fortalecimiento de la industria vitivinícola y del enoturismo.
La Santísima Trinidad es un desarrollo con distintas personalidades, pues cuenta desde con sembradíos de vid, olivos y lavanda hasta con un hotel boutique, restaurante y cancha de polo.
Ubicado a solo 10 minutos de la ciudad nombrada Patrimonio de la Humanidad, sobre la carretera entre San Miguel de Allende y Querétaro, en Santa Catalina los asistentes a la vendimia disfrutaron del vino de los proyectos hermanos La Santísima Trinidad y Viñedos San Lucas, acompañados de una deliciosa variedad de paellas y asados, música en vivo y la pisa de uvas.
“Hoy cerramos las vendimias de Guanajuato en este grandioso viñedo, el más nuevo, gracias a todos los productores que se sumaron a estas fiestas por compartir con nuestros visitantes el encanto de la vid y los aromas y sabores de los vinos guanajuatenses. Sin duda, estos cuatro meses vivimos grandes historias en Guanajuato, tierra del vino”, dijo Álvarez Brunel.