“Es bien sabido que Diego Rivera y Frida Kahlo son los dos artistas que simbolizan el espíritu de Diego y yo. Son embajadores de la mexicanidad.
“Ambos supieron exponer de una manera seductora muchos de los detalles de la cultura de México. Poseían una lista de platillos mexicanos favoritos, que en su mayoría eran sencillos pero muy sabrosos. Por ejemplo, Frida era amante de los moles, el pipián y todo tipo de tacos. Por su parte, para Diego, comer era una fiesta, más si en su mesa había mole”, comentó Cristian Marcos, director del restaurante.
A partir de la muestra de Guillermo Kahlo, que será exhibida durante un mes, se dará un continuo impulso a artistas mexicanos.